Ronda Rousey: "Mi debut en UFC fue más grande que WrestleMania"
Seguramente WWE echa de menos en estos momentos a Ronda Rousey. Su parón competitivo llega justo en una nueva crisis creativa y de ratings para la compañía, después de conocerse que la «Evolución Femenil» no logró estar a la altura de las circunstancias en términos de beneficios. Pero a pesar de ello, nadie duda de la capacidad taquillera de Rousey, gracias a su pasado en las MMA, y concretamente en UFC. Etapa que «Rowdy» recordó en una entrevista, donde confesó que su debut sobre la compañía presidida por Dana White fue más grande que WrestleMania.
Megan Olivi logró sacar unas interesantes declaraciones a Rousey durante el reciente
«Sí, estelarizar WrestleMania fue muy grande. Creo que es cosa del tiempo y la perspectiva. Pero la pelea entre Liz Carmouche y yo [UFC 157] me pareció algo más grande. Aunque fuese ya hace años y no la viera tanta gente. Fue en el Honda Center, que quizás tiene una capacidad para 20 mil personas. Compáralo con WrestleMania, donde estuve frente a 80 mil asistentes y millones de espectadores… Pero para mí, aquella pelea contra Carmouce fue el momento más trascendental. De haber sido de otra manera, la implicación de las mujeres en las MMA habría terminado antes de empezar.
«Con WrestleMania pareció que las estrellas se alinearon y el universo conspiró para que tuviéramos éxito. Y en ningún momento dudé de que lo tendríamos. En cuanto a lo de Carmouche, hubo muchos factores externos: los números tenían que ir bien, yo tenía que ganar el combate de una manera emocionante y otros muchos factores de los que preocuparme».
Y una vez vivida ambas experiencias, Rousey comparó el desgaste de las MMA con el de la lucha libre
«Físicamente son distintas. Las MMA son sin duda más estresantes. Bueno, tú sabes que podría darle a una paliza a cualquiera que entrara en esta habitación ahora mismo, pero hay muchos factores. El entrenamiento, las semanas previas a la pelea, la prensa, irte a dormir pensando en todo esto… Es lo verdaderamente complicado, no tanto la parte física. Y con WWE es un no parar. Y yo tomé el camino fácil, porque todo el mundo trabaja 300 días al año. Sus cuerpos no descansan tanto como los nuestros en las MMA, pero creo que sus mentes sí».
