El tuit de Harper que sugiere una WWE fuera de lo PG

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10-03-2019
Siempre es una grata noticia conocer el regreso al ring de un talento tras una prolongada ausencia. Sobre todo si este llevaba cerca de ocho meses inactivo y merece una nueva oportunidad. Harper disputó un combate la pasada noche en house show desde Rochester (New York), venciendo a Mojo Rawley. Y el ex-Wyatt quiso expresarse

Siempre es una grata noticia conocer el regreso al ring de un talento tras una prolongada ausencia. Sobre todo si este llevaba cerca de ocho meses inactivo y merece una nueva oportunidad. Harper disputó un combate la pasada noche en house show desde Rochester (New York), venciendo a Mojo Rawley. Y el ex-Wyatt quiso expresarse a posteriori vía Twitter… de una manera un tanto poco ortodoxa. Diríamos que propia de un producto alejado de lo PG.

https://twitter.com/LukeHarperWWE/status/1104645796711055361

«Hoy fue un día jod***mente tremendo».

Lógico que haya propiciado varias reacciones de los seguidores.

https://twitter.com/SuperS_J/status/1104690959231574021

https://twitter.com/justingroves1/status/1104664903967629312

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https://twitter.com/im_dumb_lol/status/1104761190323052546

«Es muy extraño ver a un luchador de WWE decir palabras malsonantes en Twitter, pero de veras me alegro que les permitan hacerlo«

Una tendencia que ya evidenció Ronda Rousey, por supuesto, quien se está convirtiendo en la adalid actual de un producto más cercano a la TV-14. El pasado 28 de febrero, una contundente respuesta a Becky Lynch resonó bastante.

“¿Con F quieres decir ‘fake’ [falso]? ¿Falsa como tu mi**** de ‘palanca al brazo’ sin sentido, que ni siquiera funciona y luce como si estuvieras agarrando la ver** que te gustaría tener?”

Desde entonces, «Rowdy» no ha bajado el pistón. De hecho, va a más, con ese reciente «Wrestling is fake» que incluso hizo creer a muchos que el enfado de la Campeona Raw era legítimo. Y volviendo a la red de los trinos, pueden echar un vistazo a su línea temporal. La palabra «zor**» se ha convertido en una imprescindible de su lenguaje. Resultado: Rousey y su diatriba contra WWE se hicieron virales.

Una «adulteración» de contenido que sólo puede reportarle mayores audiencias, considerando los pésimos resultados desde finales del 2018. Interesante que, después de tanto tiempo,

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tal vez los ingresos por mercancía ya no tengan tanta importancia económica para WWE; una de las conclusiones que pueden sacarse a bote pronto de tal giro en su política. Ahora, los ratings televisivos vuelven a ser la prioridad, sobre todo respecto al acuerdo con FOX.

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