Así recompensaba Bobby Lashley a los extras en WWE
Una manera clásica en la que una compañía de lucha libre presenta o construye a un powerhouse son las luchas squash en las que destruye rápidamente a uno, dos o incluso tres luchadores que acostumbran a ser talento local contratado únicamente para esa noche o miembros oficiales del elenco que no gozan de muchas oportunidades, los llamados jobbers. Así fue el primer combate de Bobby Lashley en AEW. Enfrentó y venció en dos minutos a Cheeseburger y Joe Keys en Dynamite el 20 de noviembre.
► Una compensación por los daños causados
Pero nos desviamos de su empresa actual –en su segundo choque, «The All Mighty» derrotó al ex campeón del mundo Swerve Strickland en Full Gear– para mirar a la anterior, WWE, donde el veterano disputó muchas luchas siguiendo este modelo. Luchas donde su oponente u oponentes no lo pasan nada bien y por ello Lashley tenía la costumbre de compensarlos con un regalo. Él mismo lo cuenta en su reciente entrevista en The Lame Guys.
«Quiero estar defendiendo el título o luchando por él. He ganado el Título de ECW, el Título de WWE, el Título de TNA y el Título de AEW. Quiero conseguirlo porque puedo; basándome en mi historia, trayectoria y quién soy, puedo tener ese título, y estaría justificado. Más importante aún, sería algo para que otros puedan aspirar. No soy alguien fácil de alcanzar. Cuando llegas a mí, no necesariamente quieres estar ahí. Quiero tener la lucha por el título, ganar y seguir ganando, pero luego tener esa lucha por el título y que sea como ‘Oh, diablos.’ Una vez que logre eso, creo que sería bueno para mucha gente en AEW tener ese objeto inamovible que superar. Puedo ser eso para muchos.»
¿Qué opinión tienes de las luchas squash?