WWE revela sus "Year-End Awards" del 2018
Con el calendario de PPVs finalizado tras TLC, y sin ningún otro evento de peso a la vista, llega la hora de hacer balance del año en WWE. Tal vez uno de los mejores luchísticamente hablando de la historia reciente, aunque el elenco principal haya tocado fondo. NXT se consolida como la joya de la corona de la compañía, pese a seguir siendo la tercera marca en discordia. Indicativo de que no figure en los siguientes galardones: los «Year-End Awards», que sólo contemplan a Raw y SmackDown. Pues bien, he aquí los premiados a juicio del Universo WWE.
Los «Best Male» y «Best Female» recayeron sobre Braun Strowman y Becky Lynch. El primero pese a que sigue con sus vitrinas sin estrenar (individualmente). Falló en el intento de conquistar el Campeonato Universal bajo Royal Rumble y fue vencido por
De Lynch poco hay que añadir que no digamos cada semana. Su ataque a Charlotte en SummerSlam la convirtió en la favorita del público, cuando realmente debía convertirla en la gladiadora más odiada de SmackDown. Y recibir de lleno un derechazo de Nia Jax hizo que la gente empatizara aún más con la irlandesa. WWE no puede ignorar su tirón, de ahí que figure en todas las quinielas para estelarizar WrestleMania 35.
El mejor equipo es The Bar, con unos Cesaro y Sheamus consolidados, que lograron resarcirse de su derrota en el último magno evento frente a Strowman y Nicholas. Así, una vez pasaron a SD, conquistaron por primera vez el cetro de duplas de esta marca, que todavía mantienen.
En la siguiente categoría se sitúan Reigns y
Lynch aparece de nuevo, esta vez como protagonista del «Best Match». Junto a Charlotte, en el PPV Evolution, dio forma a la mejor lucha del 2018, según los aficionados. Logro para las féminas, que demuestran contar de esta manera con un importante aval al otro lado de las pantallas. Esta «Revolución» responde a las expectativas luchísticas.
«Best Return» va para Dean Ambrose, y seguramente merecido, aunque ahora su ángulo con Seth Rollins haya degenerado en consonancia con la marca roja. Tras ocho meses de ausencia por una grave lesión, el lunático reapareció en el episodio de Raw del 13 de agosto, ayudando a «The Architect» a zafarse de
El siguiente premio, «Best Diss» (Mejor Dardo»), también luce justo. Y se resume en una contundente frase: «La única puerta que has derribado es la de la habitación de John Cena«. Ronda Rousey escupió esto a la cara de Nikki Bella durante la edición de Raw del 15 de octubre.
https://youtu.be/CZMnnzbmshM
«The Most Shocking Moment» no se adscribe a un regreso o traición, sino a un ataque. El que Randy Orton ejerció mediante un destornillador sobre una oreja de Jeff Hardy (Hell in a Cell).
En cuanto a «Funniest Moment», no podía ser de otra forma, el tropezón de Titus O’Neil durante Greatest Royal Rumble. Y especialmente brillante considerando que supuso un hecho involuntario.
The Shield se hizo con el reconocimiento de «Best Reunion». Efímera, eso sí, pese a lo innegable de las expectativas que levantó en su momento, allá por agosto.
Por su parte, Paul Heyman ganó el «Best On The Mic». Sobra decir que a lo largo del año volvió a demostrar por qué nadie lo iguala en este aspecto. Esencial desde hace más de un lustro para el éxito de Lesnar.
Positivo que Elias figure como «Breakout Star». Un reconocimiento que esperemos sirva para que WWE se dé cuenta del potencial de este talento, y pase pronto a puestos estelares. De lo contrario, corre el peligro de que su candencia decrezca. Quizás demasiado pronto impulsarlo de cara a WM, pero sí o sí, la próxima temporada debe ser la de su ascenso.
Raw recibe el de «Brand of the Year». Lo que me lleva a dos conclusiones. O bien casi nadie ve SmackDown Live, o bien las votaciones han sido adulteradas.
No obstante, el «Best General Manager» tuvo a Paige de triunfadora, que como saben, dirige SD Live. Igualmente, Naomi fue el «Talento Más Infravalorado», luchadora de la marca azul.
Por último, cierra la lista Baron Corbin como «Most Hated». Buen indicativo para él de que sabe encorajar al respetable.
