John Cena vs. Roman Reigns: la batalla de la IWC

Ser el rostro de una compañía no es para cualquiera. Sé que suena más de lo mismo, pero es más complejo de lo que muchos creen. Pues además de las cualidades básicas como el carisma, las habilidades al micrófono y el desenvolvimiento en los cuadriláteros, juegan otros factores que van más allá de la labor delante de las cámaras.

Ser el rostro de una compañía supone ser el más duro trabajador (otorgando entrevistas, recorriendo el mundo y haciendo apariciones especiales), el responsable de dar la cara en todo momento, de cumplir los sueños de centenares de personas y, en estos tiempos de exposición absoluta, demanda tener el mejor de los comportamientos las 24 horas del día, pues ser el rostro de una compañía, al menos en WWE, significa que

Muchos de los aficionados que critican a Roman Reigns por sus debilidades hablan de otros candidatos a los que consideran superiores. Como si fuera para cualquiera. ¿Finn Bálor? Flojo al habla. ¿Seth Rollins? No se destaca como técnico. ¿AJ Styles? Chistoso, puesto que tiene la misma edad que John Cena, el hombre que tratan de reemplazar. Con esto no pretendo menospreciar sus opiniones, simplemente que el asunto es mucho más complejo que tirar nombres por doquier (lo que tampoco me convierte en un «fanboy» de Reigns, por cierto, término que a algunos les encanta utilizar).

El rostro de WWE

Han sido muchos los casos con el paso de los años de intentos fallidos de el Hombre en la compañía. En su momento, Ultimate Warrior se acercaba bastante a lo que los altos mandos entendían como el «paquete completo» (carisma, decente micro y, aunque limitada, un habilidad en el ring que no era menos que la de su precesor,

Digan lo que digan, eso es algo que Roman Reigns sí tiene, y en cantidades. No te puede gustar, quizá te de bronca que no cumpla en ciertos aspectos o, como dijo Cena hace unos Raws atrás, puede que sea algo así como «una copia suya creada por la empresa». Pero no digas que no tiene carisma; Luger no tenía carisma. Y la gran, enorme diferencia, que de hecho es bastante evidente y obvia, está en que uno despierta fuertes reacciones (por más que sean mayoritariamente abucheos) mientras que el otro apenas producía algo. Y no nos olvidemos de las tempranas respuestas que el Big Dog obtenía antes de ser impulsado a lo grande, tiempos en los que era ovacionado por todos.

Por supuesto, hay más. Para no ir demasiado lejos,

Verán, con esto voy a que por más renombre que tengan, más talento que derrochen, incluso entre la élite es difícil encontrar a un sólo individuo que cargue semejante imperio en sus espaldas.

Después está la excusa de que Reigns es sólo músculo y que eso es lo único que lo convierte en «El Elegido». ¿Es realmente así? No lo creo. Y es que además de ello, cumple a la hora de subirse al ring y, lo más importante, corta tickets. Quizá no tanto como Cena, lo cual ha creado preocupación, pero

Debemos entender que los Hogan, los Hart, los Michaels, los Austin, los Rock o los Cena no son cosa de todos los días; así como los Maradona, los Jordan, los Federer o los Ali tampoco en sus respectivos deportes. Por ende, no es tan simple buscarles sustitutos. Y no, no soy un pro-Reigns tampoco, pero si debemos buscar posibles reemplazos, no creo que haya mucho más que podamos agarrar. Y aunque sea verdad que WWE cuenta hoy con uno de los elencos más talentosos de toda su historia, no veo a nadie (y con eso lo incluyo al «Emperador Romano») que pueda calzarse los zapatos de Cena ahora mismo. Pero tampoco veo a alguien que pueda calzarse los de Reigns.

John Cena y Roman Reigns en: La batalla de la IWC

Todo esto que hablé son temas que se han tocado durante los últimos 36 meses en la conocida como la Internet Wrestling Community (Comunidad de Lucha Libre en Internet), quienes se han ganado la reputación como la base de seguidores

Si bien uno se imaginaba que semejante encuentro no tendría lugar sino hasta WrestleMania, nos encontramos en el momento perfecto para quitarle a Cena el peso de cargar con la empresa. Aunque no se anime a reconocerlo, todos sabemos que su prioridad hoy en día está en la pantalla grande, no muy diferente a lo que ocurrió con Hogan y The Rock en su tiempo. Mientras tanto, Reigns sigue marcando territorio tras triunfos contra leyendas como Randy Orton, Triple H o el Undertaker y Cena se perfila como su último gran reto antes de ser el legítimo «dueño del patio». Es inminente que eventualmente cruzará caminos con Brock Lesnar, pero para entonces ya llegará como el chico bueno top por sobre cualquier nombre de la compañía, sea a tiempo completo o parcial.

Ya volviendo al tema central del escrito, debo admitir que me sorprendió el manejo que se le otorgó a esta rivalidad. Con las falencias del uno y el otro como así a quién le pertenece el trono siendo los argumentos principales, WWE se metió en un terreno desconocido con el fin de darle un toque mucho más realista y polémico a una lucha que de hecho está envuelta eso, la polémica. Digo esto porque estamos hablando si se quiere las dos Superestrellas que más discusión han despertado en la Era Moderna, ambas criticadas por esto o aquello, algo que la empresa supo explotar sacando a relucir los puntos débiles de cada cual.

Veamos algunos ejemplos:

John Cena a Roman Reigns:

— «Hay gente que me aplaude porque respaldan mi filosofía y hay otros que me abuchean porque no. Y cada semana escucharás a esa gente que tan desesperadamente quiere que cambie el contenido de mi personaje, quizá haciendo un pequeño heel turn (frase con doble sentido, que también podría entenderse como cambio a rudo). Pero contigo es diferente…

— «Digamos la verdad, tú no eres El Tipo, eres un simple tipo. Un tipo que intenta desesperadamente calzarse unos zapatos que nunca le entrarán. Escucha con atención, joven: no soy el Undertaker, no soy un veterano al final de su carrera con una cadera destrozada; soy más rápido, más fuerte y estoy más hambriento de lo que jamás estuve en toda mi vida.»

— «¿Dices que te odian porque quieren que seas un chico malo? No. Ellos te odian porque, en primer lugar, apestas… (aquí Reigns olvida sus líneas, Cena se aviva y le replica): «Se llama una promo, chico, así que si quieres ser el Big Dog deberás aprender cómo se hace.»

— «Okay, entonces todos piensan que tengo una bola de cristal, que tengo unos poderes mágicos para decidir el futuro de todos. Hombre, no puedo distinguir si eres ciego o estúpido. Escucha, ellos (el universo WWE) tienen las llaves, siempre las tuvieron y siempre las tendrán. Pero tú en verdad crees que soy un tiburón, que mando a todos al fondo del mar, que nado hasta la cima. Pero yo usé el Campeonato de los Estados Unidos para introducir a nuevos talentos como AJ Styles o Kevin Owens, por nombrar algunos.»

— «Yo te culpo a ti: todavía estoy aquí porque tú no puedes hacer tu trabajo. Deberías estar avergonzado de alguien de medio tiempo, porque puedo trabajar a medio tiempo mejor de lo que tú nunca podrías hacerlo a tiempo completo.»

— «Vas a recibir una paliza por parte de un tipo que te ha estado cuidando las espaldas por años. Te he visto cometer error, tras error, tras error. Sólo estaba esperando el momento correcto para correr tu trasero. Sales aquí y dices que este es tu patio. Ellos (el universo WWE) no parecen estar muy de acuerdo.»

— «En No Mercy, considérame una prueba anti-drogas: no me vas a superar.»

Roman Reigns a John Cena:

— «La razón por la que te abuchean es porque ven a través tuyo. Eres un farsante; un pelotillero que puede aprender a hacer todo, así que si sacas todo eso, no eres más que una perra farsante. Y no sólo eso, eres una perra farsante a medio tiempo. Y seré castigado si no me parto el trasero el viernes, sábado, domingo, lunes, todas las semanas para que tú puedas aparecer en el Today Show.»

— «¿Qué vienes a hacer aquí? Vas a enterrar tanto talento joven como puedas, porque eso es lo que haces. Así es como te mantienes en lo alto de la cima. Pero no puedes enterrarme a mí, John. No puedes tocarme. Soy la única persona en WWE que John Cena no puede ver. Así que dime, ¿por qué me usaría mí mismo, a mi legado y a mi sangre para ser el próximo John Cena cuando puedo ser… el único e irrepetible… Roman Reigns?»

— «Estaba teniendo un gran combate (con Jason Jordan), algo de lo que no tienes idea. De hecho, ahora lo que pienso, he tenido más grandiosos combates en dos años de los que tú tuviste en toda tu carrera.»

— «Verán, yo no soy como John, no tengo el habla… dejo que mis acciones hablen por sí solas. Eso quiere decir que cuando digo algo, significa algo. John Cena es el mayor hipócrita que alguna vez haya puesto un pie en este ring. Y si no me creen, John se los dirá él mismo (transmisión de una vieja promo de Cena criticando a The Rock por trabajar a tiempo parcial al estar en Hollywood, que remata con un ‘te veo la próxima semana, estrella de cine.’). ¿Deberíamos llamar a Cena ahora, San José?

Para hacerlo desear más, WWE también pensó el que no hubiera intercambios físicos entre ambos a antes de No Mercy, intentando hacer lo posible para diferenciar a esta rivalidad del resto, una que diera que hablar y se mantuviese tan polémica como los implicados y lo que hay en juego. Y para eso no necesitaban de autos que explotaban o camiones de cerveza o títulos siendo arrojados al río. Con el sólo hecho de desenmascarar las verdades que tanto escondieron por años (o muchas de ellas, ya que algunas se exageraron a propósito), fue más que necesario para contentar a todos. No sé, no puedo hablar desde la perspectiva de los más pequeños,

Vivimos en la denominada Reality Era (más allá de eso de la New Era), y no hay duda de que todos los encuentros entre Reigns y Cena de las últimas semanas hicieron justicia a este término, y qué mejor oportunidad que cuando no hay oro, ni amistades, ni rachas, ni amoríos de por medio. No, una oportunidad mucha más importante que eso, la de coronar al nuevo (o no) rostro de la WWE. Pensar que dentro de unos cinco, diez años, cuando el Big Dog sea la indiscutible cara de la empresa, recordaremos aquel cara a cara contra el legendario John Cena y notaremos, entonces sí, qué tan significativo fue. La cita del domingo quedará marcada en los libros de historia, así que no olviden seguirnos en SÚPER LUCHAS para seguir el minuto a minuto.

Lo mencionado ya les da una idea de mi pensar acerca de la rivalidad, el combate que nos espera esta noche y la trascendencia del mismo, pero ¿qué opinan ustedes? ¿Quedaron satisfechos con el desarrollo de la historia entre Cena y Reigns? ¿Creen que este encuentro consolidará a este último como la nueva cara de WWE de una vez por todas? Dejen sus opiniones en la caja de comentarios.