Terence Crawford contra Yuriorkis Gamboa: Crawford retuvo el título ligero

Por Gladys Trujillo

Luego de la victoria de Matt Korobov sobre «Bolivita» Uzcategui, llegó el momento de que se enfrentaran Terence Crawford y Yuriorkis Gamboa, por el Título de Peso Ligero de la Organización Mundial de Boxeo.

La iniciativa de los primeros rounds fue propuesta por Yuriorkis Gamboa. La velocidad de sus manos fueron la clave con la que le puso presión al campeón. También sus piernas jugaron un gran papel, pues logró entrar y salir casi sin golpes en contra.

Por algún momento, Crawford peleó al contragolpe, le cedió un poco de terreno al «Ciclón» pero con cierta reserva, sin arriesgar de más, como para tomarle la medida y saber desde que distancia y en qué lugar atacar.

La zurda del campeón le dio buenos dividendos a partir del cuarto round, cuando empezó a lanzar golpes rectos a la cara de Gamboa. Si bien Gamboa no cayó, empezó a sentir el poder de los puños de Crawford. Gamboa hizo más trabajo de pierna y apretó el cuerpo cuando Terence le lanzó los golpes de poder.

El quinto episodio fue una gran exhibición de golpeo de ambos, aunque un poco más de parte del campeón. Nuevamente la zurda de Crawford le abrió la puerta para ablandar a Gamboa. Y es que logró tundir a Yuriorkis de forma tal que lo mandó a la lona. Una vez que el cubano se puso de pie, respondió el ataque con un par de buenas combinaciones. Sin embargo, un golpe tras otro le conectó varios impactos que cada uno le restó poder y equilibrio, tanto así, que terminó el round enganchado de Crawford, para evitar la caída.

Sexto, séptimo y octavo round la continuidad del ataque de izquierda de Crawford. El el octavo Gamboa volvió a la lona y de ahí se fue a la debacle.

Gamboa salió al noveno round ya tocado. Crawford cambió un poquito la estrategia y con doble derecha mandó a la lona a Gamboa. Valiente como es el «Ciclón» se puso de pie y continuó, buscó el golpe de fortuna que le permitiera remontar pero sólo encontró nuevamente la mano derecha del campeón. Uno a uno los últimos golpes sobre Gamboa fueron directo al oído para aturdir el centro del equilibrio. De esa ya no pudo reponerse, el réferi detuvo el combate.

Finalmente se cumplió lo predicho por el campeón y salió con la mano en alto con la frase: «El vencedor y aún campeón, Terence Crawford»