Roxanne Modafferi detalla por qué UFC 271 es el momento adecuado para retirarse
Roxanne Modafferi es única. Si se necesita evidencia, no busque más allá de la gran cantidad de apoyo cuando ingresa a su pelea de retiro en UFC 271 .
En los días previos a la cartelera del sábado, en la que Modafferi (25-19 MMA, 4-7 UFC ) se enfrenta al contendiente en ascenso Casey O’Neill (8-0 MMA, 3-0 UFC ), «The Happy Warrior» intenta concentrarse tanto como pueda. Sin embargo, dado que es muy querida por la comunidad de MMA, hay recordatorios constantes. No hay escapatoria.
Siempre dispuesto a irradiar positividad, Modafferi ingresó al día de los medios de comunicación de UFC 271 de la misma manera. Está agradecida y orgullosa de los logros de su carrera y está en paz con una decisión que evitó durante mucho tiempo. La reflexión demuestra que logró el objetivo general.
“Todo este tiempo me he centrado en, ‘Quiero ser más fuerte. Quiero ser más fuerte. Quiero ser más fuerte. Ese es mi espíritu de artes marciales. Ahora, después de esta pelea, realmente quiero poder decir: ‘Me volví más fuerte. Mira lo que he hecho. Esos son mis sentimientos al entrar en esta semana de pelea”.
Una vez que se sintió incómoda con la palabra «jubilación», Modafferi aceptó que era hora de llegar a la encrucijada del desgaste mental y físico. La decisión fue doble.
“Una fue que siento que solía despertarme a las 4 a. m. lleno de energía, como, ‘Vamos a desayunar. Vamos a correr. Hagamos flexiones. Ahora me despierto a las 6, como, ‘No quiero tener Mortal Kombat a las 10 am, ahora’. Mi cuerpo simplemente no tiene ganas. Realmente quiero centrarme más en el jiu-jitsu. Realmente he estado sintiendo ese impulso en lugar de ‘golpeémonos’.
“Además, siento que en el entrenamiento después de una dura sesión de sparring, terminé teniendo dolores de cabeza. No quiero ir por ese camino de trauma cerebral. Creo que he tenido suerte de tener 49 peleas y no tener un trauma cerebral. Empecé a usar protectores de cabeza y ese problema mejoró. Pero apesta usar un casco porque la gente lo agarra y dices: ‘Me estoy asfixiando con el casco con la correa alrededor de mi cuello’. Ya no es tan divertido como solía ser. Quiero dar el 100 por ciento a mis campos de lucha. Siento que no podré seguir adelante. Así que siento que ahora es un buen momento para cambiar mi vida”.
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Modafferi, de 39 años, es considerada por muchos como una pionera de las artes marciales mixtas femeninas. Superó a toda una generación de sus contrapartes femeninas, evolucionó con el deporte, se ganó el respeto de sus compañeros y tuvo éxito.
Si gana en UFC 271, será un final de libro de cuentos, seguro. Es la guinda del pastel, pero no es para todas las canicas. Su carrera no se verá contaminada gane o pierda. El orgullo siempre estará ahí, y eso es algo de consuelo para Modafferi.
“Me siento orgullosa de mí misma. He hecho mucho. Nada puede quitarme lo que realmente he hecho”.
UFC 271 se lleva a cabo el sábado en el Toyota Center. La tarjeta principal de pay-per-view se transmite en ESPN+ después de las preliminares en ESPN/ESPN+.