Robert Whittaker ofrece detalles de su lesión
La cirugía dental de Robert Whittaker, provocada por la lesión de su último viaje al octágono, descubrió un sorprendente problema subyacente.
Whittaker sufrió su primera derrota por sumisión en la UFC. Sufrió un revés aplastante que también le dejó con graves daños dentales, un recuerdo brutal de la implacable manivela en la cara de Khamzat Chimaev en la ronda inicial del UFC 308 el mes pasado.
Tras la pelea, aparecieron fotos que mostraban la boca de «La Parca» en mal estado, con los dientes inferiores visiblemente desalineados. Esto alimentó las especulaciones de la comunidad deportiva, que creyó que se había fracturado la mandíbula en varias partes.
Sin embargo, el australiano aclaró que no era así. En lugar de eso, la lesión, que se había desarrollado de forma acumulativa desde su juventud, afectó al hueso inferior que sostiene sus dientes, provocando que se rompiera y se desplazara
Durante un reciente episodio de su podcast MMArcade, Whittaker se sinceró sobre los antiguos problemas bucales que le han afectado a lo largo de los años. El ex campeón de peso medio de la UFC reveló que sus problemas con los dientes inferiores resurgieron durante sus últimas peleas.
Aunque logró solucionarlos temporalmente, la situación empeoró progresivamente, hasta llegar a un punto de ruptura tras su último combate.
«Siempre he tenido los dientes de abajo en mal estado
«The Reaper» continuó revelando que sus problemas dentales acabaron provocando la extracción de toda su fila inferior de dientes. Durante la intervención, los médicos descubrieron un gran absceso en sus encías, que podría haber empeorado su estado si no se trataba.
«Nunca he podido morder una manzana desde que tenía 19 años. Siempre he tenido los dientes mal y debería haberme ocupado de ellos mucho antes. Ya no los tengo, no los necesito, mi vida es mucho mejor sin ellos. Sin embargo, cuando me los quitaron, encontraron un quiste enorme en la mandíbula, y creen que de ahí podían venir las infecciones de los dientes, así que todo sucede por una razón».
Antes del UFC 308, Whittaker estaba ganando impulso para una posible tercera oportunidad por el título, tras encadenar dos impresionantes victorias sobre Ikram Aliskerov y Paulo Costa a principios de este año. Sin embargo, tras su revés contra Chimaev, esas aspiraciones al campeonato han quedado momentáneamente al margen.