La empresa K-1 se encuentra en crisis - ¿Se avecina una crisis para las MMA en el oriente?

Los resultados en Ratings han llegado y no son alentadores. El share fue del 7.6% , representando un bajón de cerca del 33% por ciento en relación al año anterior, que alcanzó un share del 10.7%. El punto alto del evento fue el combate entre Satoshi Ishii y Katsuyori Shibata, que alcanzó un 12.1% de share. Se estima que sin esta pelea los números del evento abrían sido aún más bajos.

Con una cadena de malos ratings, FEG necesitará notas altas en el K-1 WORLD GP del 11 de diciembre y, sobretodo, en el Dynamite!! , de fin de año, para mantener contenta a la cadena TBS, que transmite sus eventos a nivel nacional. Una debacle en esos eventos podría incluso ocasionar que la cadena no firme un contrato para emitir los carteles en 2011, o que dicho contrato se vea disminuido en comparación.

El judoca Satoshi Ishii está probando ser alguien difícil de tratar; luego de su victoria en una pelea de MMA en K-1 MAX, se habló de su participación en el evento Dynamite!!, pero inmediatamente Ishii se alejó de esa idea y pidió un combate vs Tito Ortiz (presumiblemente contando con la posibilidad de que este fuese cortado por UFC) , y ahora mismo está pidiendo una pelea de K-1 en el evento de K-1 WORLD GP. Sea como sea, el rating que logró Ishii durante K-1 MAX, si bien la nota alta del evento, tampoco representó un número alto, aunque es cierto que al lograr una victoria su «appeal» se ha incrementado.

FEG presumiblemente disparará todas las armas que tenga disponible al momento en su arsenal, en un intento por mantenerse a flote, a la espera del dinero de inversión que PUJI Capital teóricamente reuniría para hacerle la guerra a WWE y UFC.

Las noticias no son buenas en general pero son pésimas para el Kickboxing, que aunque prolifera en diferentes niveles a nivel mundial, no tiene ni de cerca ninguna organización que brinde la exposición y, hasta hace poco en las categorías menores, el dinero que K-1 provee.

Para los fans de las MMA, el temor consiste en la posibilidad de quedar en el estado actual del K-1: con un epicentro económico único. Si las mma japonesas fuesen a caer solo quedaría el centro económico americano, que aunque marcha bien, no es ni mucho menos inmune a los problemas propios de los deportes de combate.

Fuente: MMA-Clips.com