Cinco promesas que deberíamos seguir de cerca en AEW
Y se fue la segunda. Double or Nothing deslumbró, Fyter Fest cumplió; y en próximas paradas, Fight for the Fallen y All Out prometen maravillas, incluyendo (este último) la coronación del primer Campeón Mundial. Sus contendientes serán Chris Jericho y Adam Page, la leyenda y el potencial sucesor de Kenny Omega.
Pero el título máximo de la nueva grande de la lucha libre será portado tarde o temprano por estrellas que aún están por consolidarse, talento con capacidad de sobra pero que todavía no cuenta con la popularidad necesaria y buscará a toda costa hacerse un nombre en la industria, y para SÚPER LUCHAS, probablemente lo logre:
JUNGLE BOY
Hay quienes todavía lo señalan y lo reconocen como el hijo de Luke Perry. No se puede negar que en algunos aspectos aún presenta cierta inmadurez y tiene mucho por mejorar, como así tampoco que
PRIVATE PARTY
Lo poco que se ha visto de este par de jóvenes maravilla desde donde se lo mire. Una combinación de carisma, personalidad y una enorme, enorme calidad sobre las doce cuerdas, hablan de un equipo que, creemos, dispone de muchos puntos fuertes que terminarán por ayudarlos a explotar. Sin haber llegado siquiera a los 25, es un dúo que deberíamos seguir de cerca. Futuros Campeones de Parejas AEW.
He aquí un individuo que podría terminar por convertirse en un favorito de la afición. No sólo por su sólido desempeño en el ring; más que nada, por ese distintivo oscuro personaje que en verdad poco de personaje tiene. Su experiencia de vida, traumática como lo fue, lo empujó a originar a una doble personalidad. Mitad vivo, mitad muerto («porque la mitad de mí está muerta»). De esas atracciones que tanto interesan al fan promedio de la lucha.
BRITT BAKER
Muchas quejas se han hecho por la división femenil de All Elite, señalada como la menos fuerte de todas dentro de la empresa naciente. Sin embargo, apenas hemos visto de las mujeres, y Britt Baker ya ha pisado fuerte. Nadie iba a apostar por una dentista transformada en luchadora, pero la gladiadora se postula como el peón más preciado de su división con apenas cuatro años de experiencia previa. Anoten su nombre.
MAXWELL JACOB FRIEDMAN
Self High Five ya le dedicó un escrito aparte mucho antes del nacimiento de All Elite. Allí, se hizo hincapié en su más notoria arma: las promos. Recuerda a rudos del pasado que sabían hacerse odiar con naturalidad, apuntando nuestro redactor al «Randy Orton de sus inicios, pero sin la misma estatura». Para WWE, como se recalcó, eso sería sinónimo de limitaciones. No para AEW, donde de perfeccionar su trabajo en el cuadrilátero (que no es malo), fácilmente podría convertirse en el máximo rudo de la compañía eventualmente.
