Bobby Roode podría perder su tema de entrada
Obviando el sempiterno tema de Roman Reigns y el cada vez más flagrante caso de Bayley, en estos momentos hay una Superestrella a la que le vendría muy bien un cambio a rudo: Bobby Roode.
El veterano, que debutó en WWE dentro de NXT, comenzó por todo lo alto su andadura, gracias a un atractivo personaje que se robó las miradas, sin mostrar demasiado sobre el ring, y que lo llevó a conquistar el máximo cetro de la marca.
Una vez en el elenco principal, Roode no ha encontrado el éxito que muchos preveían, pese a que puede decir que ya ha ganado el Campeonato de Estados Unidos y participado en WrestleMania.
Sin embargo, fue tras su paso a Raw cuando el veterano se encuentra ahora mismo en tierra de nadie
Bryan Alvarez ya apuntó varios indicios que indicarían un inminente cambio a rudo para Roode, que tal vez darían un revulsivo a su situación, pero de momento, nada se ha consumado. Asimismo, Dave Meltzer sigue creyendo que sucederá de un momento a otro, y bajo la última edición de la Wrestling Observer Radio, afirmó que cuando ocurra, WWE seguramente decida modificar su tema de entrada.
«Tal vez lo estén pensando, puede que piensen que su música lo hace muy popular como técnico, así que
«Incluso si cambian su música, seguramente a la gente no le importará«.
«Glorious Domination», recuerden, alcanzó el puesto número uno de bandas sonoras más descargadas de iTunes hace casi dos años, en agosto de 2016. Y es que esta composición de CFO$ sirvió de ariete para que Roode se ganara la aceptación de los fans, al igual que Shinsuke Nakamura con su «The Rising Sun». Y resulta muy posible que, después de todo, sea lo más recordado del paso de ambos por el Imperio McMahon, al menos dentro de los grandes focos.
A un mes de SummerSlam, y con un cartel que poco a poco va tomando forma, se intuye que Roode lo tendrá muy difícil para encontrar un hueco. Veremos si se produce ese viaje al «lado oscuro», y un nuevo acompañamiento musical lo beneficia.
Aunque a los seguidores les costará acostumbrarse a presenciar su llegada al ring sin canturrear «Glorious, no I won´t give in, I won´t give in ‘til I’m victorious, and I will defend, I will defend…»
