Cuando un luchador obtiene un campeonato significa muchas cosas, pero la más importante es que será la cara de la compañía y llevará sobre sus hombros el peso de representarla a nivel mundial. Un gran escaparate mediático que ciertamente conlleva más dinero para las arcas del talento en cuestión pero que, dada la responsabilidad y exigencia en cuanto a la agenda se refiere, no todos son capaces de llevar a cabo con acierto.
Cuando acostumbramos a ver vídeos del pasado, tendemos a pensar que esas grandes Superestrellas lo han conseguido todo, sin embargo hay veces en las que nos equivocamos, como por ejemplo al mirar la lista de leyendas de WWE con más títulos en su haber.
El debate sobre la importancia de los títulos y sobre quién hace a quién; si el título a la Superestrella o viceversa, siempre estará sobre la mesa. El Campeonato Mundial de WWE sólo lo han conseguido 52 Superestrellas desde su creación en 1963 y eso es menos de un campeón al año.
SÚPER LUCHAS te trae una lista muy especial en la que sólo hay cinco leyendas pero en la que podía
► Kamala, una de las leyendas de WWE más olvidadas
Kamala es uno de los primeros «monstruos» de la compañía de Vince McMahon, llegando a tener un papel protagonista en algunas de las historias más importantes de la etapa dorada del deporte de entretenimiento (años 80 y principios de los 90).
¿Quién no recuerda su rivalidad con Undertaker, sus fallidas cuentas de tres en las que no acertaba con la posición en la que tenía que colocar a su rival o si queremos ir un poco más lejos, la rivalidad que le llevó a encerrarse en una jaula con el mismísimo André el Gigante.
A pesar de este protagonismo que siempre le hizo estar en primera línea, Kamala nunca consiguió hacerse con un título en WWE ya que siempre fue visto como una amenaza, sí, pero también como un personaje más cercano a la comedia que al realismo competitivo.
► Jake «The Snake» Roberts
Parece mentira o quién lo iba a decir son algunas de las frases que se nos vienen a la cabeza cuando miramos el currículum de Jake «The Snake» Roberts y vemos que nunca obtuvo un título en WWE. Siendo una de las leyendas de WWE con más nombre y más recuerdos a sus espaldas para toda una generación, es miembro del Salón de la Fama de esta compañía desde 2014 e incluso a día de hoy, trabajando para AEW, lleva con orgullo el anillo que le acredita como tal en todos los programas semanales de la nueva empresa de Tony Khan.
Roberts consiguió al menos un título en todas las compañías en las que militó, desde American Wrestling Federation a Stampede Wrestling pasando por Smoky Mountain Wrestling o Mid–South Wrestling Associtation, pero fue incapaz de hacer lo mismo en WWF a pesar de ser figura esencial en el wrestling de los ochenta y noventa. Sus rivalidades más sonadas con Macho Man Randy Savage y, una vez más, con Undertaker, pueden considerarse el premio por el que siempre será recordado dentro de este negocio.
► Sting
Quizás estemos pecando de oportunistas en este artículo al incluir a Sting, pero como una de las leyendas de WWE tiene todo el derecho del mundo a formar parte del mismo. Sting llegó a WWE en 2014, con 55 años, en el declive de su carrera deportiva pero no perdió el tiempo. Tras perder con Triple H en su debut dentro de WrestleMania 31, fue directamente por el campeón Seth Rollins e hizo su vida imposible hasta aquella fatídica noche de Night of Champions.
Precisamente fue en este PPV, Night of Champions 2015, cayó lesionado cuando estaba luchando por el campeonato que podía haber puesto la guinda al pastel de su carrera. Un luchador que fue cuerpo y alma de WCW en los mejores años de esta empresa y que llegó a WWE siendo un humilde atleta más dentro del vestuario y sabiendo cuál iba a ser su papel.
► Dusty Rhodes
Una de las leyendas de los Estados Unidos más celebradas, padre y creador de NXT y miembro del Salón de la Fama de la compañía de los McMahon (Clase 2007), nunca ganó ningún título con esta empresa. «El Sueño Americano» pasó gran parte de su carrera en los territorios de la NWA en una encarnizada rivalidad con Ric Flair, llegando a WWE (WWF por aquel entonces) en 1989 para abandonar la compañía tan solo dos años después y marcharse a WCW donde entró a formar parte del organigrama técnico.
Dusty Rhodes ha tenido indudablemente más importancia fuera que dentro del ring para WWE. Su legado siempre será recordado hasta el punto de tener una estatua en el recibidor de las oficinas de WWE en Stamford.
► Lex Luger
Lex Luger no ganó ningún campeonato en WWE a pesar de ser la mayor Superestrella de la compañía en 1993. No pudo despojar a Yokozuna del título a pesar de ganar el concurso para realizarle un bodyslam al gigante japonés y compartir la victoria del Royal Rumble 1994 con Bret Hart.
Sus mayores logros llegaron fuera de WWE; por ejemplo en WCW donde formó parte del exquisito grupo de atletas en ganar el Campeonato de los Estados Unidos, el Campeonato de televisión y el Campeonato por Parejas que consiguió en más de una ocasión. Trabajando para la compañía de Jim Crockett formó equipo con Sting dentro de los 4 Horsemen (1988).
Lex Luger abandonó muy dolido WWE y solo días después apareció en el primer episodio de WCW celebrado el 4 de septiembre de 1995 para convertirse en uno de los protagonistas de la Guerra de los Lunes.