Un retraso normal de un vuelo, como a cualquiera le puede ocurrir, fue utilizado para decir que el Príncipe de Arabia Saudita había «dado la orden de que no saliera el avión» e incluso unos más se aventuraron a decir que todo había sido un secuestro por problemas entre Vince McMahon y dicho país.
La situación que vivió Rusev en Arabia Saudita fue bastante fea, al igual que para las demás Superestrellas y el equipo de producción, pero no tuvo que ver con ningún secuestro. Solo se trató de un caso en donde después de 15 horas de viaje y un día preparando el show y luchando, a cualquiera le desespera un retraso. Incluso si la espera para despegar fue en un hotel de lujo y con mucha comida gratis.
► Así vivió la demora del avión Rusev en Arabia Saudita
Joe Brophy de The Sun se dejó llevar por los rumores, pero fue directo al preguntarle a Rusev si habían sido secuestrados en el país del Medio Oriente. Obviamente Rusev lo negó:
«Fue una experiencia desagradable, por supuesto, porque todos queríamos irnos a casa después de estar fuera por más de 24 horas. Estábamos todos listos para salir y no pudimos. La frustración creció cada hora y el que yo pida oraciones no es nada nuevo.
«Mi padre es pastor, creo en Dios, así que siempre pido oraciones y lo hice solo porque quería ir a casa, no porque nos tomaran como rehenes. No creo que nadie en su sano juicio vaya a retener a 170 personas, ciudadanos estadounidenses, como rehenes, no creo que eso se refleje bien en ningún lado».
Pero por si no queda suficientemente claro, aquí están otras declaraciones de Rusev en la misma charla:
«Gano mucho dinero, definitivamente regresaré. Me encanta, me encanta cada viaje que hacemos allí, me encanta cómo rompemos las barreras con las mujeres luchando allí y que Lana pueda ir. Creo que es una gran victoria para la compañía, no solo por eso, sino por abrir nuevas puertas y nuevas oportunidades para desarrollar en el futuro, es simplemente increíble».
Bien por Rusev
Mal por el Kayfabe
Maldita sea, este tipo no respeta el Kayfabe.
Quien iba a querer secuestrar a un perdedor cono rusev