Uno de los personajes más respetados de la lucha libre mexicana es don Jesús Reyes. El «padre de más de veinte», Máscara Año 2000, tiene una trayectoria de sobra conocida por cualquier aficionado de este deporte, pues ha triunfado en cualquier empresa donde ha luchado.
Máscara Año 2000 platicó en exclusiva con SÚPER LUCHAS y compartió reflexiones acerca de su vida activa como luchador, su dinastía y de una pasión que cada vez tiene menos oculta: la música.
► Máscara Año 2000: entre la lucha y la música
Hace unas semanas, el hermano de Cien Caras y Universo 2000 señaló que los eventos sin público no le gustan. Ahora confirmó que no le causaría problema dejar de luchar, aún cuando el público regrese a las arenas.
«Aunque hubiera público ya no lucharía, ya no me interesaría. En realidad, al empezar el año 2020, pensé que sería mi último año como luchador, pero como todo se paró ya no me afectaría no volver a luchar. Aunque si el Consejo Mundial de Lucha Libre me llamara, cumpliría con el compromiso, porque ellos se han portado muy bien conmigo».
Con 62 años de edad y más de 40 años de experiencia, confesó cuánto tiempo calcula que le resta de carrera como luchador.
«Al ver este panorama, yo creo que el 2021 podría ser mi último año, aunque en realidad no me molestaría ya no regresar a los cuadriláteros».
► Le abre la puerta de lleno a la música
Parte de esa tranquilidad que transmite al decir que no le afectaría retirarse, se debe a que le ha dado más espacio a su pasión por el canto.
A inicios del 2020, Jesús Reyes grabó su primer videoclip de una canción que él mismo escribió, titulada «Ay, qué dolor».
«Siempre me ha gustado cantar. Desde chiquillo escuché música ranchera, y hasta la fecha, de vez en cuando me pongo a cantar«.
Su video se encuentra disponible en YouTube. Máscara Año 2000 tiene varias decenas de canciones escritas por él. Desde 2017, en Spotify, se encuentran disponibles cinco canciones suyas: Sangre caliente, Estamos a mano, Adiós, adiós amor, Implorando perdón y Las cuentas claras.