Nacido en Santiago de Cuba un 13 de abril de 1940, pero avecindado en México desde principios de los sesentas, José Ángel Nápoles hizo con su vida deportiva una demostración de innumerables hazañas. Apodado «Mantequilla» por su estilo suave de soltar las manos. Eterno Campeón Mundial de Peso Welter Unificado, consiguió tener números que son comparables con los de Muhammad Ali, consiguiendo trece defensas consecutivas.
Su nombre está inscrito con letras de oro en el deporte de las orejas de coliflor, y su fama lo convirtió en un símbolo de la Ciudad de México, un verdadero ídolo popular, lo cual lo llevó a protagonizar una película con Santo, el Enmascarado de Plata (La Venganza de la Llorona, Miguel M. Delgado, 1974).
Pero su éxito fue mundial, cabe recordar aquella ocasión el 9 de febrero de ese mismo 1974, cuando le disputó el Campeonato Mundial de Peso Medio al argentino Carlos Monzón en París, Francia. Pelea que le sirvió al genio de la pluma latinoamericana Julio Cortázar para escribir su célebre cuento: La noche de Mantequilla.
Su récord terminó con 77 ganadas por sólo 7 derrotas, con 54 triunfos por la vía del cloroformo. Tras su retiro, Mantequilla invirtió parte de su dinero en centros de espectáculo de la vida nocturna en México, los cuales no supo administrar de forma adecuada, terminando los últimos años de su vida con muchos problemas económicos. El Consejo Mundial de Boxeo, precedido por don José Sulaimán y más recientemente por su hijo, Mauricio, apoyaron y dignificaron la vida del otrora monarca welter.
El día de hoy, el propio Mauricio Sulaimán, a través de su cuenta de twitter, confirma la muerte del peleador a los 79 años de edad:
Mantequilla NAPOLES es ya Campeón para la eternidad. Se nos fue el gran campeón pero lo hizo de manera digna y con el amor de sus hijos quienes cuidaron de él. Descanse en Paz mi gran ídolo, compadre de mi papá , mexicano de corazón aunque cubano de nacimiento ! Adiós Mi Campeón
— Mauricio Sulaiman (@wbcmoro) August 16, 2019
«Mantequilla NAPOLES es ya Campeón para la eternidad. Se nos fue el gran campeón pero lo hizo de manera digna y con el amor de sus hijos quienes cuidaron de él. Descanse en Paz mi gran ídolo, compadre de mi papá , mexicano de corazón aunque cubano de nacimiento! Adiós Mi Campeón.»
Que en paz descanse Mantequilla