Cual pez que se muerde la cola, la falta de confianza de Vince McMahon por los actuales talentos y su excesivo uso de la nostalgia torpedean la propia creación de nuevas estrellas que luzcan tan grandes como las de antaño.
Aunque con el último documental sobre la obra y milagros de The Undertaker, ‘Brothers of Destruction‘, centrado en su historia junto a Kane desde que este debutó allá por 1997, parece que Mr. McMahon quiere acallar a los críticos. De lo contrario, uno no entiende muy bien cómo WWE dedica dos horas a «Los mejores combates en WrestleMania de Roman Reigns» y a cambio repasa una historia de más de dos décadas en apenas 45 minutos.
► Undertaker sigue sin descansar en paz
Y aunque nuestro colaborador Vicente Beltrán ofreció a SUPERLUCHAS un resumen exclusivo de esta obra audiovisual, un servidor no puede evitar fijarse en un detalle de la misma justo al final.
Haciendo una valoración de qué significó Undertaker para su vida, Kane tiene estas palabras de elogio hacia su «hermano».
«Uno tiene personas que han sido determinantes en su carrera, pero también en su vida. Están esos puntos de inflexión, cuando alguien llega y puedes echar la vista atrás y decir que si eso no hubiera sucedido, las buenas cosas que me sucedieron nunca habrían tenido lugar. Y tú eres una gran parte de ese sentimiento».
A lo que «The Phenom» responde.
«El sentimiento es mutuo. Nuestra amistad fuera del ring, es muy especial saber que fuimos tan importantes para nuestras trayectorias, nuestras carreras, lo que es muy guay. Y quién puede decir incluso que esto se ha acabado».
¿Comentario casual o causal a fin de generar mayor expectación sobre la implicación de Taker el domingo en Survivor Series 2020? Sea como fuere, queda claro que el «Deadman» aún no ha descartado definitivamente un último combate, pese a que bajo una reciente entrevista asegurara no tener el nivel físico para competir al nivel de WrestleMania.
Y precisamente, por lógica magnitud del evento, se apunta al próximo «Show de los Shows» como potencial escenario de una despedida con todas las de ley, si el coronavirus lo permite. Survivor Series 2020 podría suponer el detonante.