Estamos de regreso en CAMPAL, segunda época en la era digital, y cuarta considerando la era impresa de SÚPER LUCHAS (¡Somos tan viejos ya!). Pero hablemos de lucha libre:
► Breve historia del Campeonato Nacional Femenil
El origen del título mexicano que reconoce a la mejor luchadora se remonta a los años cincuenta del siglo pasado. Al estar prohibida por un pacto de caballeros en la capital del país, la lucha libre femenil se refugió en la provincia mexicana. Al menos se tienen documentado dos campeonatos femeniles nacionales durante esos años, sin embargo se denotó más el que ostentaron La Dama Enmascarada y su prima, Irma González. Ambas gladiadoras dieron encuentros memorables con el título de por medio desde mediados de los cincuentas hasta bien entrados los sesentas cuando La Dama Enmascarada dejó la lucha. En esa línea de ese campeonato también están nombres como Rosita Williams, Chabela Romero, Jarochita Rivero, Chela Salazar y unos cuantos nombres más.
A principios de los ochentas, el campeonato quedó un tanto cuanto sepultado, pues el relevante para todos en ese entonces era el Mundial Femenil UWA, mientras que el nacional solo llegó a verse durante algunas funciones en el Estado de México, sin tener alguna relevancia.
► El aval de la Comisión y AAA
Con el levantamiento del infame veto de la lucha libre femenil a principios de los ochentas, la Comisión de Box y Lucha del Distrito Federal decidió avalar ahora sí un título nacional femenil. Así, en 1986, en la Arena Aplataco, Reyna Gallegos logró vencer en la final de una eliminatoria a La Briosa para ser la primera Campeona avalada por una Comisión de respeto en el país.
Sin embargo el título siguió disputándose en arenas chicas del circuito metropolitano. Reina dejó vacante el fajín por gravidez en 1988, y otra vez estuvo vagando de un lado a otro: La Briosa, Zuleyma y La Marquesa tuvieron ese título en esa época. No fue sino hasta 1991, cuando la joven ruda Neftalí se hizo del cinturón que éste tomó relevancia en todo el país, disputándolo contra las mejores luchadoras y en las principales arenas. Xóchitl Hamada, Vicky Carranza y Lola González son algunos de los nombres importantes ante los que Neftalí lo defendió. Cayó ante Sirenita de una manera un tanto cuanto polémica.
Tras un lapso en que Sirenita lo dejó vacante, La Diabólica del Caribe lo tuvo, y Sirenita lo recuperó, fue ella quién lo llevó a AAA.
En su etapa con la Caravana Estelar, el Campeonato tuvo momentos de verdadera luz. La lista de monarcas nacionales en su etapa con AAA es importante: La Aplanadora Martha Villalobos, la joven Tiffanny y Lady Apache fueron las monarcas durante esa época.
► El campeonato regresa al CMLL
Con el boom que tuvo la lucha libre femenil a principios de siglo, gracias, entre muchos otros a nuestro Editor en Jefe, Ernesto Ocampo, el CMLL repatrió a Lady Apache, con todo y el Campeonato Nacional Femenil. Sin embargo dejó (una vez más) el título vacante para 2007.
Después de un breve torneo cibernético, el 4 de mayo de aquel 2007, Marcela y Princesa Sugey llegaron a la final dando una de las mejores luchas en la historia de la lucha libre femenil, no solo del país sino del mundo entero. Ernesto Ocampo escribió en la reseña de ese evento para SÚPER LUCHAS:
“Una vez más las diosas del ring se manifestaron en la Arena México en los comienzos de los tiempos de igualdad, de disolución del machismo. Una vez más demostraron que no son relleno de programaciones; que no son incitación al morbo. Demostraron que, en su género, pueden ser aguerridas y fieras, como las míticas amazonas que podían hacer frente a cualquier ejército de varones.
«Marcela y Princesa Sugey, quienes quizá sean, kilo por kilo, las dos mejores luchadoras mexicanas de la actualidad, llegaron a esta lucha tras sobrevivir a un relevo cibernético de catorce luchadoras celebrado la semana pasada. El CMLL les otorgó el digno turno semifinal, y no lo desaprovecharon, pues dieron no sólo la mejor lucha de la noche, sino la de mayor duración, y, por deducción -al ser en mano a mano- la de mayor rendimiento».
Esa noche Marcela salió con el brazo en alto y vinieron años buenos para el título nacional, tanto en la cintura de la “morenaza de fuego” como con Princesa Blanca. Sin embargo, ante un lustro brillante, vino una época muy opaca y gris, pues la siguiente campeona sobajó el título de una manera grotesca, defendiéndolo incluso en antros de mala muerte contra mujeres no luchadoras y en prendas que no tenían nada que ver con lucha libre.
Zeuxys trajo un nuevo brillo a ese título en el 2015, sobre todo cuando su rivalidad contra Princesa Sugey comenzó a tener relevancia. Después de varios intentos, no sólo contra Zeuxys, la hoy Campeona Mundial CMLL, pudo hacerse de ese título, al que le dio más brillo que nunca el 25 de febrero de 2017, casi diez después de haberlo disputado por primera vez.
Y TAN… TAN…
(Continuará)