Durante la emisión este pasado domingo de Clash of Champions, WWE confirmó la realización de Hell in a Cell, su próximo PPV del calendario, el 25 de octubre.
Evento que inicialmente estaba marcado en la agenda de la empresa para el 1 de noviembre, pero que se adelantó una semana a fin de que Raw y SmackDown no quedaran sin un gran evento durante el próximo mes.
Y según lo comentado por el Wrestling Observer, el esperado choque entre Sasha Banks y Bayley apunta a darse allí, cuando en Clash of Champions las hostilidades que estas dos gladiadoras mantienen continuaron por todo lo alto.
4️⃣ weeks from tonight. #HIAC pic.twitter.com/bDgAV8EtlE
— WWE Network (@WWENetwork) September 28, 2020
► ¿Final del camino para McIntyre y Orton?
Pero la pasada noche en Raw, tuvimos un indicio de que habría otro importante duelo en agenda para ese Hell in a Cell 2020, porque Randy Orton no ha pasado página en su rivalidad con Drew McIntyre.
Tras acabar dentro de una ambulancia el domingo, gracias a las intervenciones de Big Show, Christian y Shawn Michaels (decisión creativa elogiable en su pretensión narrativa, aunque perjudicial para el aura de McIntyre), «The Viper» quiso cobrarse venganza, y apalizó a sus veteranos agresores mientras estos jugaban al póker.
Hecho que supongo llevará a que McIntyre acepte concederle otra oportunidad por el Campeonato WWE, en lo que sería ya la tercera en menos de dos meses, ahora dentro de la Celda Infernal. Una estructura que se diría favorable para Orton, pues sólo suma una derrota de cuatro participaciones, allá por 2005 frente a The Undertaker. Por su parte, McIntyre nunca ha competido al amparo de tan peligrosa estructura.
De resultas, esperen los inevitables rumores acerca de una victoria de Orton, que se remontan al inicio de estas hostilidades, debido, como ya reportamos, a los pésimos datos de audiencia de Raw desde que la pandemia hizo que los shows televisivos de WWE lucieran sin público en las gradas. No obstante, también apuntado por un servidor, quizás el ThunderDome haya salvado el reinado de «The Scottish Psycopath».