Anthem Sports & Entertainment podía haber tomado muchas malas decisiones para que de nuevo, viéramos como TNA acababa disparándose en su propio pie cuando parecía levantar cabeza. Y entre todas, tomó la peor posible: despedir a Scott D’Amore.
Transcurridas casi 24 horas, todavía no se entiende realmente qué llevó a Anthem a prescindir de la figura más importante de la historia reciente de TNA. Según varias fuentes y la propia multinacional, el excesivo protagonismo que venía tomando D’Amore en los últimos años.
Un argumento que, seamos sinceros, suena poco creíble. D’Amore había tenido implicaciones muy puntuales en pantalla, y de ninguna manera puede decirse se robaran el foco a costa de otros cual Vince McMahon o Vince Russo durante la «Attitude Era». Al contrario, dejar que la calidad de los talentos hablara por sí sola fue el gran acierto de D’Amore. Cabe interpretar entonces la existencia de alguna razón extra aún pendiente de conocerse.
► El salvador de TNA
Hemos recogido ya varias reacciones internas ante tan desafortunado movimiento, como la de Jordynne Grace o la de Moose, ambos visiblemente disgustados.
Pero ahora quiero recoger la de David Penzer, hasta el pasado diciembre vinculado a TNA, pues este dejó una reacción menos emocional y a cambio más cerebral, que resulta interesante.
I'm just going to say it. Without @ScottDAmore Impact/TNA would be a video library probably owned by WWE. I saw him strip that thing down to the studs and rebuild it on a less than skeleton budget to where it stands today which is ready to take off. Hope it survives-Massive loss!
— David Penzer (@davidpenzer) February 7, 2024
«Sólo voy a decir esto. Sin Scott D’Amore Impact/TNA sería una videoteca probablemente propiedad de WWE. Lo vi reducirlo todo hasta los huesos reconstruirlo con un presupuesto raquítico, hasta donde está hoy día, lista para despegar. ¡Espero que sobreviva a esta enorme pérdida!»
Penzer sabe de lo que habla, pues vivió toda la última etapa laboral de D’Amore, desde incluso antes de que Anthem Sports & Entertainment asumiera la propiedad de TNA, entre rumores constantes por entonces de que WWE buscaba comprar su videoteca, algo que habría provocado el cierre de toda la promotora. Y pese a todo, D’Amore nunca quemó puentes con WWE y fue capaz de aprovechar la mediaticidad de esta.