El vandalismo hacia el automóvil del Último Guerrero, acaecido la mañana del viernes en el estacionamiento de la Arena México destapó sólo un poco la alcantarilla que lleva hacia la cloaca del Sindicato de Luchadores de la empresa Lutteroth, el cual quedó acéfalo desde la muerte de Brazo de Oro.
La historia del sindicalismo en México no ha sido color de rosa, pues si bien en tiempos revolucionarios los sindicatos lograron amplios avances en la defensa de los derechos de los trabajadores, el sistema político priísta alcanzó su hegemonía cuando pudo cooptar o frenar a los sindicatos mediante las confederaciones, principalmente la CTM.
En menor escala así ha sido el sindicalismo de los luchadores profesionales, pues la antigua Unión Nacional de Luchadores, de don Adolfo “El Patrón” Bonales, velaba por los intereses de sus agremiados y los apoyaba ante cualquier eventualidad, pero una vez que su lugar fue tomado por el Sindicato Nacional de Luchadores en 1970, el camino fue cuesta abajo, hasta que en la etapa de Manny Guzmán, a principios de los noventas, la corrupción fue tanta que a nadie le interesaba pertenecer a una unión que sólo se preocupaba por cobrar cuotas.
Mientras que AAA formó su propio sindicato —dirigido por Fuerza Guerrera—en el CMLL varios luchadores comenzaron a formar uno propio, en el que fue elegido Jaque Mate como líder. Esto no duró mucho, pues Paco Alonso comenzó a mover sus fichas para afiliar el sindicato a la CTM, lo cual logró a través de un abogado, cuya maniobra fue no crear un sindicato real, sino un subsindicato dentro del Sindicato Nacional de Trabajadores en Hoteles, Restaurantes y Clubes Deportivos, Sociales y Conexos de la República Mexicana, aunque para la prensa siempre dicen que es el Sindicato de Luchadores de la Empresa Mexicana de Lucha Libre.
Jesús Alvarado “Brazo de Oro” quedó como dirigente de esta agrupación hasta su muerte, aunque a través de los años una multitud de luchadores hablaron pestes de él, obviamente en declaraciones off the record, por temor a represalias.
Acusaban a Chucho Alvarado de velar por los intereses del patrón y no por los derechos de los trabajadores. También de organizar funciones y no pagarles, pues se consumía las ganancias en forma de polvo. Incluso habría provocado despidos “justificados” al prestarse para tenderle trampas a compañeros que sabía tendrían la prueba antidoping.
Toda la familia del Brazo de Oro trabajaba para el sindicato. A decir de los empleados del CMLL, la familia sentía a éste no como una unión de empleados, sino como un negocio familiar. Es por eso que consideraban a Felipe Alvarado «La Máscara«, hijo del Brazo de Oro, como sucesor natural en la dirigencia.
Sin embargo, aún no se elige a una nueva dirigencia. De acuerdo a los estatutos del sindicato, quien queda a la cabeza hasta que haya una nueva elección, es el Secretario del Trabajo, que en este caso es Nitro.
El problema con el Último Guerrero parece haber surgido el día jueves, durante una reunión donde también estaban Máximo y La Máscara. Comentarios del Último Guerrero, posiblemente hacia Brazo de Oro; posiblemente hacia La Máscara, y relacionados con el sindicato, provocaron el enojo del clan.
Máximo y La Máscara fuera del CMLL
Al otro día, La Máscara, Máximo, Psycho Clown, Brazo de Platino, Alimaña (cuñado de Brazo de Oro) y otros más, acudieron a la Arena México a destrozar el auto del Guerrero.
La viralización del video hizo que el CMLL tomara cartas en el asunto, sacando de todas sus programaciones tanto a La Máscara como a Máximo, y varias fuentes nos han asegurado que fueron ya despedidos. Aparentemente, la ÚLTIMA función que tendrá Máximo en la Arena México (de acuerdo al propio CMLL) será en la Dragonmanía XII, el próximo sábado 27, donde está programado junto a Marco Corleone para enfrentar a Último Guerrero y Rey Bucanero. El CMLL dejará que participe debido a que esa función es de la empresa Toryumon; sin embargo, viendo quiénes son sus rivales, podríamos apostar a que no se presentará.
Mientras tanto, los luchadores quieren a Último Guerrero como dirigente sindical, pero Paco Alonso hace lo posible por evitar votaciones y sea él quien designe al sucesor del finado Brazo de Oro como Secretario General de la Sección Lucha Libre del Sindicato Nacional de Trabajadores en Hoteles, Restaurantes y Clubes Deportivos, Sociales y Conexos de la República Mexicana.