Descanse en paz Jesús Alvarado Nieves, el Brazo de Oro

Otra pérdida para la familia luchística. Jesús Alvarado Nieves, mejor conocido como Brazo de Oro, falleció a consecuencia de un paro cardiaco en la madrugada de este viernes.

Brazo de Oro, hijo de Juan Alvarado Ibarra “Shadito Cruz”, tuvo, al igual que sus hermanos, una infancia difícil.

“Yo no tuve tiempo de jugar de chamaco con los demás chavos —contaba en una entrevista con José Haldar para la revista Lucha Libre en 1991—, y no porque no quisiera, sino porque no podía. En ese tiempo, mi padre salía a luchar a una gira que se llamaba de la Costa, y yo me tenía que quedar a cuidar a mis carnalitos, que estaban más chavos, mientras que mi jefecita se tenía que fletar lavando ropa ajena para afrontar los gastos de la casa.

“Pero no me arrepiento. Sé que fue duro y que muchas personas viven eso aún en la actualidad, así que deben ser positivos y superarse para salir adelante. No hay otra forma para salir de esos baches de pobreza”.

En esa dura infancia, Jesús se llevaba a sus hermanos Juan y Pepe a las arenas, donde vendían revistas de lucha viejas y también trabajaban como acomodadores, conduciendo a los aficionados hasta sus butacas, en donde les entregaban un programa de mano y recibían una propina.

Ya en su adolescencia, Jesús comenzó a entrenar a escondidas de su padre, y cuando éste se enteró lo corrió de la casa. Tuvo que interceder Felipe Ham Lee para que Shadito le diera una oportunidad. Shadito accedió a apoyar a su muchacho de 16 años, e incluso le regaló un nombre que había utilizado casi 20 años antes: El Hombre del Brazo de Oro, inspirado en la película de Frank Sinatra dirigida por Otto Preminger. Jesús decide acortarlo, llamándose simplemente Brazo de Oro. Era entonces 1975.

Brazo de Oro comenzó a brillar en las arenas de la periferia capitalina, en especial con sus duelos ante los Villanos, con quienes existía una rivalidad desde la infancia. Los hijos de Ray Mendoza y los hijos de Shadito Cruz, siendo niños, se agarraban a golpes en las calles por defender el honor familiar.

Quizá esto inspiró a sus hermanos a entrenar. Pepe fue el primero, y eligió el nombre de Brazo de Plata, debutando en 1977. Juan debutaría hasta 1980 como El Brazo. Él había estado paralítico por cinco años debido a que en un balneario cayó de pie, lesionándose las piernas y la columna vertebral.

Aunque el ascenso del Brazo de Oro parecía conducirlo al estrellato individual (en 1977 lo nombraron La Revelación del Año varias revistas), su sociedad con sus hermanos fue lo que marcó el resto de su carrera.

Como rudos, fueron llamados “Los Mosqueteros del Diablo”, y causaban estragos en cualquier arena donde se presentaran, teniendo batallas sangrientas y emocionantes. Además de Pepe y Juan, pronto debutaron otros hermanos Alvarado: Sputnik/Robin Hood en 1980 (más tarde sería Brazo Cibernético), Súper Brazo en 1983 (el menos talentoso de todos) y Brazo de Platino en 1986.

 

Los Brazos, como era de esperarse, lograron su mayor rivalidad ante los Villanos. El promotor Francisco Flores manejó esa rivalidad con inteligencia, y esperaba llevarla a su conclusión con un duelo de tríos donde el capitán perdería su máscara seguido de una revancha, donde se apostarían las máscaras y la cabellera contra las máscaras de los otros.

 

Sin embargo, Flores falleció en mayo de 1987 y los planes se truncaron. Desapareció la empresa Promociones Mora, y se fundó una nueva en su lugar: Lucha Libre Internacional, dirigida por los herederos de Flores: Carlos Máynes y Esperanza Flores, con el apoyo de Karloff Lagarde.

Máynes quiso llevar a cabo la función, pero directamente apostando las tres máscaras. Sin embargo, no hubo un acuerdo favorable en cuanto a la bolsa que habría para ese combate. La rivalidad era lo más candente en ese momento, en especial por las fotografías a color que publicaba la revista Espectacular, antecesora de Súper Luchas.

 

 

Brazos y Villanos recibieron entonces una oferta tentadora de otra empresa, llamada Siber, la cual tenía como programador a Carlos Elizondo. Esta empresa les ofreció 50 millones de viejos pesos a cada uno (en la actualidad serían, aproximadamente, 150 mil pesos) para hacer la lucha de máscaras en el Palacio de los Deportes.

Máynes, furioso, habló con Francisco Alonso Lutteroth, de la EMLL, y entre ambos lograron boicotear la función moviendo todas las influencias posibles. La función se quedó sin permisos a unos días de realizarse, y se pensó en llevarla a Ciudad Juárez, Tijuana o Monterrey, siendo ésta última la elegida, por ser el feudo de Carlos Elizondo.

Sin embargo, la poca antelación, la poca publicidad y el hecho de que los regiomontanos no se sentían identificados con la rivalidad, provocaron que el evento fuera un fracaso. El encuentro se realizó y ganaron los Villanos. Los organizadores desaparecieron y los Brazos no recibieron el pago por sus máscaras.

 

Brazos y Villanos terminaron volviendo a LLI con la cola entre las patas. Para entonces, Brazo de Plata se había vuelto el más popular del grupo debido a su simpatía, lo que hizo que bajaran el tono de sus rudezas.

En la nueva década, con el arribo de la TV a la Arena México, Antonio Peña los convenció de trabajar en exclusiva con la EMLL. Los Brazos se convirtieron en los rudos chistosos: Ya no más sangre ni violencia extrema; ahora todo se reducía a la rutina de los hermanos que perdían por descuidos y siempre culpaban a Brazo de Plata, quien se ponía a llorar. El cronista Alfonso Morales lo bautizó como “Súper Porky”.

Brazo de Oro con su primera esposa, Beatriz Mendoza, y sus hijos Felipe (quien ahora lucha como La Máscara), Ana Beatriz y la bebé Cintya Marisela.

Los Brazos pasaron el resto de la década apostando y perdiendo las cabelleras, tanto que se volvió un tropo entre los aficionados de la lucha.

Jesús comenzó a bajar su número de fechas, y su amistad con Francisco Alonso Lutteroth lo llevó a la dirigencia del sindicato del CMLL, un sindicato blanco, es decir, que trabaja para la empresa y no en favor de los agremiados. De hecho, el sindicato es sólo una sección de otro sindicato. Es el Sindicato Nacional de Trabajadores en Hoteles, Restaurantes y Clubes Deportivos, Sociales y Conexos de la República Mexicana, Sección Lucha Libre.

Así, Brazo de Oro se convirtió en brazo derecho de Francisco Alonso para resolver pleitos laborales, aunque también, de la mano del sindicato, comenzó a promover funciones de lucha en una bolsa de trabajo.

Foto: Rostro Oculto.

 

Sin embargo, últimamente esas funciones no tenían el éxito esperado, y Jesús comenzó a acumular deudas con sus compañeros, situación que le produjo muchas preocupaciones y estrés, lo cual fue mermando su salud, además de que los Brazos nunca se caracterizaron por llevar una vida sana.

Finalmente, un paro cardiaco segó su existencia. Tenía 66 años de edad. Hoy se reúne con Shadito Cruz (fallecido en 2003), Brazo Cibernético (fallecido en 1999) y El Brazo (fallecido en 2013).

Descanse en paz Jesús Alvarado Nieves, el Brazo de Oro.

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