Pocos luchadores han dominado los estilos técnico y rudo como Arturo Casco, mejor conocido como La Fiera. Gladiador poblano de segunda generación que logró penetrar en los eventos estelares de la Empresa Mexicana de Lucha Libre por su pasión en el deporte de sus amores.
Nacido el 17 de marzo de 1961, el hijo del Hércules Poblano debutó en su natal Puebla en abril de 1977 con el personaje de Black Panther, y por más de treinta años vivió dentro de la lucha libre. Su personalidad extrovertida hacía que no pudiera pasar desapercibido, marcando una época junto a grandes rufianes que la EMLL trajo al centro del país de diversas regiones: Sangre Chicana, Mocho Cota, Herodes, Jerry Estrada y varios más. Es en los ochentas donde se vuelve muy común ver a La Fiera llevar sus rivalidades a las consecuencias máximas: lucha de apuestas.
Arturo apostó durante esa década cerca de veinte ocasiones la cabellera, a veces ganó, otras tantas perdió, pero parte de su valía era esa, llevar la lucha, la rivalidad hasta el punto del no retorno. Sus clientes favoritos fueron los hermanos Ringo y Cachorro Mendoza.
Fue también, en los ochentas que su potencial lo llevó a internacionalizarse. En Japón logró llamar la atención por la rivalidad que protagonizó con la segunda versión de Tiger Mask, a quien en México había terminado de pulir todavía con el nombre de Kamikaze Misawa.
Campeón Mundial NWA en las dos divisiones más complicadas de esos tiempos: Welter y Medio. Defendiendo ante los mejores de su tiempo: Chamaco Valaguez, Gran Hamada, Kato Kung Lee, Américo Roca y muchos más.
Con la llegada de los noventas y la renovación de los personajes por parte de Antonio Peña dentro del naciente Consejo Mundial de Lucha Libre, Arturo fue de los pocos que no se enmascararon, ¿para qué? Su personalidad no lo necesitaba. Y lo mismo se medía como rudo al Vampiro Canadiense o a Black Magic que como técnico a Jerry Estrada y su eterno compadre Sangre Chicana.
A mediados de los noventas, para ser precisos el 22 de marzo de 1996, en la Arena México, junto a Dos Caras y Héctor Garza lograron vencer a Bestia Salvaje, Sangre Chicana y Emilio Charles Jr. para hacerse del Campeonato Mundial de Tríos CMLL. El último título que ganaría en vida.
Al tiempo, y ya con la madurez de su carrera, a finales de los noventas emigra a Triple A, donde junto a varios compañeros de su generación forma una facción que logró devolverles glorias a todos los veteranos: Los Consagrados.
La Fiera fue dejando poco a poco la lucha libre, sin embargo nunca dejó el medio del todo: seguía asistiendo al gimnasio de su padre y acostumbraba aconsejar a los novatos poblanos que prometían.
Un día como hoy pero de 2010, Arturo Casco falleció, sin embargo la leyenda de La Fiera sigue en la memoria colectiva de la lucha libre mexicana.
Un verdadero maestro y un personaje más grande fuera del ring.
Un verdadero maestro y un personaje más grande fuera del ring.
Un grande de este mundo ! Incluso tiene muchas movidas con los pies que hoy en día muchos luchadores en todo el mundo usan.
Un grande de este mundo ! Incluso tiene muchas movidas con los pies que hoy en día muchos luchadores en todo el mundo usan.