El cuerpo de Jeff Hardy está maltratado y magullado. Después de más de 20 años de saltar sobre y a través varias cosas como mesas, solo por nuestro entretenimiento, le perdonarías por querer bajar el ritmo. Hoy en día no hace sus locuras de alto vuelo en todos los programas, en su lugar, lo guarda para ocasiones especiales, así lo reveló en una reciente entrevista con SPORTSbible.
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► Con la cabeza en nuevas locuras
Pero el amor eterno de Jeff Hardy por las inmersiones que desafían a la muerte no se puede negar. Todavía quiere superar una de sus acrobacias más locas, una loca Swanton Bomb desde 33 pies de altura a Randy Orton en 2008 que marcó un antes y un después en su carrera en Raw. Sí 33 pies fue genial, pero ¿Por qué no redondearlo hasta 40 pies? Esa es la mentalidad del «Carismático Enigma».
»Recuerdo estar tan asustado, pero nadie salió malherido ni mutilado de aquel salto. Eso fue desde 33 pies y quiero subir a 40 antes de que todo esté dicho y hecho. Creo que es posible en una WrestleMania, sacar una escalera real de 20 pies: esas cosas son aterradoras ya que la base de la escalera es casi tan ancha como un ring. Creo que podrías arrastrarla y hacer un Swanton en el pasillo o algo así. Ese es otro sueño con el que estoy obsesionado: sacar una escalera de 20 pies y poner a alguien a través de una mesa al estilo Swanton Bomb».
A la edad madura de 44 años, Hardy ya no es un joven para este deporte, no puede permitirse el lujo de saltar de las escaleras cada semana como lo hizo en su mejor etapa de la Attitude Era por el bien de su salud. La jubilación, sin embargo, no está en sus planes.
La leyenda de la WWE está de vuelta «a casa» en SmackDown y está anunciado para representar a la marca en el próximo pay-per-view de Survivor Series. Sigue siendo un éxito entre las multitudes en los estados y en el extranjero, sin embargo, Hardy y su mente creativa a menudo «tropiezan» para mostrar un nuevo lado de su personaje en pantalla. Una idea que surge es canalizar cierta frustración interna sobre su posición dentro de WWE.
»Creo que hay una manera de hacerse rudo sin dar la espalda a los fanáticos y sería dando la espalda a la compañía, diciendo: ‘Ok, tengo 44 años, he estado haciendo esto durante tanto tiempo y realmente estoy siendo maltratado, ¿Qué está pasando aquí?’ ¿Debo pedir mi liberación de WWE?’. Esta no es una pregunta de ‘Sí’ o ‘No’, es una pregunta de ‘¡Yay!’ o ‘¡Boo!’, déjalos ovacionar o déjalos abuchear y déjalos decidir. Es solo una idea que surgió en mi cabeza, pero podría ser una ruta a seguir. Siento que hay algo que se puede desatar dentro de mí que quiere salir y enfurecerse hasta cierto punto y espero que lo descubramos».
