Durante buena parte de 2019, a raíz de la llegada de Jon Moxley a AEW, el nombre de Chad Gable estuvo en las quinielas como un serio candidato a fichar por la novel compañía, debido a sus características luchísticas, más cercanas al «pro-wrestling» sin aditivos que al «sports entertainment».
Y pasó 2020, y entre una veintena de excompetidores de WWE que saltaron al barco de Tony Khan no se encontraba Gable, pese a que el manejo creativo soportado por este dejase bastante que desear, si bien, al menos recuperó su nombre luchístico original, dejando atrás el sonrojante «Shorty G».
Actualmente, Gable aparece puntualmente sobre las pantallas, portando un rol de entrenador que ha conducido a Otis a varias victorias en SmackDown, en una alianza que ignoramos hacia dónde se dirige, pero que relega su calidad sobre el ring a segundo plano, ya que no disputa un combate desde TLC 2020.
► Los lazos de la lucha libre por parejas
A estas alturas, quizás una incorporación de Gable no sería algo por lo que AEW estuviera dispuesta a pelear en demasía, pues junto al hecho de que ya cuentan con un elenco amplio, se hace evidente que la empresa va en busca de un salto a las «grandes ligas. Véase, nombres mediáticos que atraigan la atención de las masas.
No obstante, Gable tiene a FTR de importantes valedores; dupla contra la que, junto a Jason Jordan, Gable disputó brillantes luchas en NXT, y a posteriori, dentro del elenco principal, uniendo fuerzas con Bobby Roode.
Durante un «watch-along» en AdFreeShows, Dax Harwood reconoció que de ser él el responsable de contrataciones de AEW, ya habría intentado que Gable cambiara de aires.
«Creo que deberíamos tener a Gable en AEW, pero es sólo lo que yo creo».
Desconocemos en qué fecha concluye el actual acuerdo existente entre Gable y WWE, y si más allá de lo dicho por Harwood, AEW guarda intenciones reales de mover ficha por este antiguo Campeón de Parejas SmackDown. Desde luego el producto Élite supone el mejor escenario posible para la lucha libre por parejas, aunque, al fin y al cabo, otra vez Gable quedaría etiquetado como un talento de duplas.