«Bolivita» Uzcategui se convirtió en el karma de Andre Dirrell. Dirrell descubrió que quien la hace la paga y le salió cara.
El primer encuentro entre Uzcategui y Dirrell fue más violenta de lo que se espera de un combate de boxeo. Sí, a pesar de la sangre, todo debe ser deportivo, pero acá no sucedió así.
«Bolivita» Uzcategui perdió por descalificación y el tío y entrenador de Dirrell le lanzó dos puñetazos a Uzcategui con la guardia abajo.
Se armó un embrollo enorme, mismo que sólo se resolvió cuando volvieron a enfrentarse.
Pero en esta ocasión se resolvió bajo el nombre arte de calzarse los guantes y pegarse hasta que uno de los dos se rindiera.
Y ese fue Dirrell.
De manera aguerrida y con clase, «Bolivita» Uzcategui fue capaz de neutralizar y revertir todas las armas que le envió Dirrell.
El venezolano hizo suyo el ring a base de movimiento y muchos golpes. No le importó recibir algunos. Fue capaz de ponerle el cuerpo a los impactos de Dirrell para tenerlo en corto y luego lastimarlo.
Su juego de piernas fue esencial para hacerle ver su suerte a Dirrell pues estuvo a las vivas para no encontrárselo al choque, pero cuando Uzcategui estuvo en corto, Dirrell no supo como salir de ahí.
Dirrell tuvo aciertos cuando estuvo frente a Uzcategui y le pegó con volados, principalmente a media distancia, pero nunca pudo medir la manera en tenerlo a modo de manera adecuada porque en cada combinación, Uzcategui estaba en modo de defensa o ataque, según lo que le mandara el estadounidense.
Aunque de principio a fin la pelea fue de «Bolivita». Mostró categoría, calidad, buena estrategia y mucho poder en los puños.
Dirrell lo sintió de cerca y por eso ya no le permitieron salir a la llamada del noveno round.
De manera categórica, «Bolivita» Uzcategui tuvo su revancha tanto del primer encuentro como de la grosería que le hicieron los Dirrell.
Además, ahora es campeón interino de peso supermediano por la Federación Internacional de Boxeo.
Noche redonda para el guerrero venezolano.
*Imágenes de Showtime Boxing
Gran combate
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