Desde su fundación en 2019, All Elite Wrestling se posicionó como una alternativa. Su promesa de impulsar nuevas caras, junto con una mezcla de veteranos, ayudó a crear grandes expectativas. Sin embargo, en los últimos meses, se ha evidenciado una preocupante tendencia: AEW parece estar priorizando a veteranos y nombres establecidos en lugar de promover el desarrollo del talento joven, una decisión que podría comprometer su futuro.
►La dependencia en estrellas del pasado, un problema
La lucha libre profesional siempre ha dependido del equilibrio. El equilibrio entre estrellas establecidos —que atraen a la audiencia—y los jóvenes luchadores que representan el futuro. Sin embargo, AEW ha invertido una cantidad significativa de tiempo y recursos en figuras consolidadas como Chris Jericho y Jon Moxley. Si bien estos nombres tienen un valor innegable, la dependencia excesiva en ellos deja poco espacio para el desarrollo y crecimiento de nuevas estrellas.
Un ejemplo claro del potencial joven en AEW es Kyle Fletcher. A sus 24 años, Fletcher ha demostrado una calidad impresionante en el ring, combinando habilidades técnicas con un carisma natural que podría convertirlo en una pieza clave para la empresa en el futuro. Pero la compañía no parece estar capitalizando completamente su potencial. Fletcher podría ser uno de los pilares de AEW si se le brindara más tiempo en pantalla y oportunidades para brillar.
Esto no significa que AEW deba ignorar a los veteranos. Sin embargo, el desequilibrio actual envía un mensaje ambiguo sobre las prioridades de la compañía. Mientras la promoción de luchadores como MJF, Darby Allin y Jack Perry es un ejemplo positivo, hay muchos otros jóvenes talentos que podrían contribuir a largo plazo si se les diera la misma oportunidad.
► Crecer junto con los luchadores
El camino hacia el éxito sostenible en la lucha libre está pavimentado con el desarrollo continuo de nuevas estrellas. Empresas como WWE, New Japan Pro Wrestling y otras promotoras independientes han demostrado que invertir en talento joven no solo garantiza la renovación de su producto, sino que también construye una base de fanáticos fieles que crecen junto con los luchadores.
AEW tiene una riqueza innegable de talento joven, pero debe comprometerse más activamente a convertirlos en las superestrellas del mañana. Luchadores como Kyle Fletcher son el futuro de esta industria, y la compañía necesita demostrar que está dispuesta a darles un lugar protagónico. Si AEW no cambia su estrategia, corre el riesgo de quedarse atrapada en el pasado, mientras otras promotoras avanzan con la próxima generación de luchadores.
En un negocio tan competitivo como la lucha libre profesional, la evolución es esencial. AEW puede volver a ser la plataforma de innovación y juventud que prometió ser, pero el cambio debe comenzar ahora, antes de que sea demasiado tarde.