El 31 de enero tendrá lugar el Royal Rumble. Estamos en una de las semanas más emocionantes del año. 30 hombres se subirán al cuadrilátero y sólo uno permanecerá en pie cuando todo haya acabado. El premio, protagonizar uno de los eventos estelares de la próxima WrestleMania que tendrá lugar en Tampa durante las noches del 10 y 11 de abril.
Ya han comenzado las cábalas acerca de quién será el vencedor y nosotros no vamos a ser menos. Estas son nuestras opciones.
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► Brock Lesnar
El sorpresivo regreso de Brock Lesnar y su posterior victoria en el Royal Rumble sería una de las mayores noticias que podría tener de este evento necesitado de emociones fuertes. Y no solo por el simple hecho de su regreso y victoria, que ya de por sí sería noticia de cabecera, sino por lo que se vendría de cara a WrestleMania.
Hemos pasado el Rumble y encaramos el «Camino a WrestleMania» con un Roman Reigns como Campeón Universal WWE y un Brock Lesnar como aspirante a ese campeonato pero, ¿qué sería de Paul Heyman? ¿Con quién se alinearía? Sin dudas, esta historia tendría muchas capas y muchas direcciones diferentes que tomar, no solo por el pasado competitivo de ambas Superestrellas entre sí, sino por el presente que les obligaría a rediseñar la historia.
Ya vimos en WrestleMania 31 y WrestleMania 34 a un Brock Lesnar rudo contra un Roman Reigns cara amable de la compañía, pero lo interesante de esta situación sería ver este nuevo enfrentamiento entre ambos con los papeles cambiados, con un Roman rudo y un Lesnar perseguidor de títulos sin Heyman a su lado ¿o no? Es más, según muchos apuntaban, Brock Lesnar no regresaría a WWE hasta que regresara el público a las arenas, y con una WrestleMania que podría albergar unos 30,000 fans por noche, ¿qué mejor ocasión que ésta para el regreso de «la bestia».
► Edge
El pasado lunes en Monday Night Raw, Edge anunció su regreso al ring por primera vez este año. Desde que se lesionara en el «Greatest Wrestling Match Ever» no habíamos vuelto a saber de él, pero rompió la banca anunciando que formará parte de la misma campal en la cual hizo su reaparición estelar el pasado año.
Edge está de vuelta y tiene la intención de recuperar lo que una vez fue suyo, el Campeonato Mundial WWE. Y esta es la idea. El canadiense se esmeró e hizo hincapié en que venía por el título de Drew McIntyre, aunque el lunes bien podría ser de Goldberg.
Por cualquiera de las dos partes se nos presentaría un gran evento estelar para una de las noches de WrestleMania, Edge vs. Goldberg o Edge vs. Drew McIntyre. Hace tiempo que se viene resucitando la posibilidad de una última etapa de Edge como campeón en WWE y puede que ésta sea la oportunidad que ha estado esperando desde que tuviera que retirarse de manera forzosa (aunque temporal) tras WrestleMania 27.
► Daniel Bryan
La historia de Daniel Bryan es parecida a la de Edge, pero con la salvedad de que el primero podría encarar un reinado tras su regreso, un reinado que Daniel Bryan ya tuvo y que acabó en WrestleMania 35. Es por esta misma razón por la que Daniel Bryan se nos antoja como una de las posibles Superestrellas a la hora de ganar el Royal Rumble 2021.
Su último reinado no fue fructífero. Ni tuvo la gloria que debería de haber tenido al venir del retiro. El ser el «Campeón Planetario» no le granjeó a Bryan ningún brillo ni lustre sino más bien todo lo contrario, convirtiéndose en la cara de la compañía por la ayuda de Erick Rowan. Pero ahora debería ser diferente.
Daniel Bryan nunca ha ganado un Royal Rumble y es una de las pocas cosas que le queda por conseguir a estas alturas de su carrera, justo cuando ha expresado su deseo en más de una ocasión de ser luchador a tiempo parcial. No nos engañemos, esto no es malo y a las pruebas nos remitimos en los recientes reinados de Lesnar, por ejemplo. Cuando el campeón regresa a televisión es la gran atracción del momento, cuando todos se conectan a Raw o SmackDown para ver a su campeón.
Ver un Daniel Bryan vs. Roman Reigns es otro de los motivos primordiales por los que la victoria del luchador de Aberdeen (Washington) se nos antoja clave. Nadie puede negar que ésta sería una lucha de muchos kilates de cara a uno de los eventos estelares de WrestleMania 37. Volver a tener público y resucitar el «Movimiento Yes!» sería un aliciente más sobre la mesa.