Hoy en SÚPER LUCHAS Retro recordamos un Torneo de la Muerte que dejó a dos víctimas más en el Palacio de los Deportes capitalino. Aquella ocasión dos de las incógnitas de mayor prestigio en el costalazo mexicano quedaron en la antesala de la derrota. Tanto Fishman como Aníbal estuvieron a punto de caer, pero lograron imponerse a Kurisu y el guerrillero César Valentino.
►Fishman y Aníbal a punto de perder sus máscaras
Nuestra querida amiga Valerie Richternos hizo este video con los recuerdos de aquella velada:
Hoy, 10 de agosto, en SÚPER LUCHAS Retro nos volveremos a posicionar en el domo de cobre, el Palacio de los Deportes. Está ocasión nos iremos a un domingo 10 de agosto, pero de 1980. Aquella ocasión se organizó un torneo de parejas, dónde 12 parejas se jugaban cabelleras o máscaras. Sin final suicida.
Los equipos integrados para aquella batalla incluían a muchas de las estrellas a nivel mundial a las que Lucha Libre Internacional, la gran empresa de los independientes, nos tenía acostumbrado en ese entonces, además, claro está de los figurones nacionales.
René Guajardo y Babe Face
Los 12 equipos fueron integrados así: 1. Rayo de Jalisco y Blue Demon 2. Canek y Dr. Wagner 3. Aníbal y Fishman 4. Tinieblas y Huracán Ramírez 5. Enrique Vera y Kuniaki Kobayashi 6. Babe Face y René Guajardo 7. Ultramán y Mano Negra 8. Ángel Blanco y Dorrel Dixon 9. Matzanobu Kurisu y César Valentino 10. El Solitario y Dos Caras 11. Gran Hamada y Satoru Sayama; y 12. Coloso Colosetti y Tiger Jet Singh.
El torneo comenzó con una campal donde se dieron a conocer el orden de los encuentros. Después hubo diez luchas donde los ganadores se fueron salvando, dejando el camino dispuesto para que perdedores disputaran en la final del torneo tanto máscaras como cabelleras.
Los pronósticos apuntaban a que fueran René “Copetes” Guajardo y Babe Face, o Ultramán y Mano Negra fueran los “raspados” dentro de la lid, sin embargo ambos equipos fueron de los primeros en salvar sus apuestas.
Pese a lo que se pudiera pensar, una de las parejas más fuertes perdió sus dos primeros encuentros, y con demasiada tensión de por medio, Aníbal y Fishman, que difícilmente hubiesen sido clasificados como los favoritos a perder se encontraban ahora en la final donde para salvar sus incógnitas se tenían que jugar el todo por el todo ante el salvaje japonés Kurisu y el guerrillero César Valentino.
Cómo usted recordará, la desbandada que dio origen al grupo independiente tuvo como bandera al maestro Aníbal, su poder y técnica hicieron de él el claro símbolo que necesitaba don Francisco Flores para encabezar su primera función. Cinco años después, a pesar de ser uno de los mejores técnicos, el príncipe de seda hacía una campaña en el bando rudo.
Fishman por su parte siempre estuvo ante la caza del azul, después de haber desenmascarado a Sangre Chicana, Cobarde y El Faraón en la Arena México, además de ganarle a Blue Demon el Campeonato Mundial de Peso Welter, buscaba mejores oportunidades, nuevos logros, ya fuera de la Empresa Mexicana de Lucha Libre.
Así que los nervios de ambos debieron estar muy encrespados durante el combate. Por la otra esquina, Kurisu cumplía una temporada muy importante entre los independientes al lado de sus paisanos Sayama y Kobayashi. Mientras que César Valentino estaba ya consolidado como un gran peso semicompleto.
Pudo más, aquella noche la técnica y el poder de esa dupla azul y verde, que el tamaño físico y la violencia de los también rufianes Kurisu y Valentino. Quienes al perder fueron condenados al peluquero.
Kurisu y Valentino rapados
Tiempo después, Aníbal y Fishman disputarían varias ocasiones el Campeonato Mundial de Peso Semicompleto UWA, que poseía el verde, haciendo una rivalidad que daban ganas de verla. No queremos pensar que hubiera pasado si ambos hubieran llegado a apostar las incógnitas, aunque sin duda hubiera sido un mejor final para cualquiera de ellos que el que tuvieron.
