RevPro en Barcelona: la revolución española

El término «Forbidden Door» ha definido una manera de entender la coyuntura luchística actual, impulsada por AEW, con alianzas nunca antes vistas que animan una industria donde cada día el monopolio de WWE se siente menos monopolio a ojos del espectador abierto de miras.

Aunque esta sinergia ya era visible en las «indies» desde su concepción como tal, y el panorama español pos-COVID tenía pendiente plasmar un «crossover» de calado que atrajera miradas internacionales, hasta el anuncio el pasado enero de que este sábado 13 de abril, Revolution Pro Wrestling (RevPro), llevando sus mejores caras habituales, unirá fuerzas con Lucha Libre Barcelona (LLB) para su debut en el país ibérico.

Michael Oku, Dani Luna, Grizzled Young VeteransSu cartel pone de manifiesto las ganas que RevPro guardaba por vivir una nueva primera vez

© Revolution Pro Wrestling

► El legado de SWA

Antes de la asociación RevPro&LLB, otras casas españolas hicieron lo propio de manera puntual con varios productos británicos.

Merece la pena recordar aquel evento titulado Fight Club: PRO + Triple W – Project WhiteWolf, que tuvo lugar el 23 de junio de 2019 desde Madrid. Por entonces, Fight Club: PRO (FCP), extinta promotora de Trent Seven, era una de las grandes representantes del «boom» que vivía la lucha libre británica a finales de la década pasada, y quiso el destino que ese show conjuntado con la casa madrileña se diera cuando varios de sus nombres habituales, como Pete Dunne y Travis Banks, militaban en WWE. 

Más atrás, sin abandonar la contemporaneidad (pese a que el mundo prepandémico parezca muy lejano), podríamos remontarnos al 4 de diciembre de 2016, fecha de celebración del show Britain’s Rising IV, de British Empire Wrestling. Allí, esta empresa (afortunamente, todavía activa) y Revolution Championship Wrestling (RCW) unieron fuerzas e incluso en su estelar se defendió el Campeonato Knockouts TNA, si bien tuvo como sede la ciudad de Londres. 

Numerosos altibajos ha acusado la lucha libre española a lo largo del último siglo, y la estampa presente no es si no fruto de la semilla sembrada por Super Wrestling Alliance (SWA) a finales de los 2000 (coincidiendo con un nuevo tirón de WWE en el país). Esta promotora, oriunda de Barcelona y desaparecida en 2015, tuvo dos escisiones: las actuales Triple W (desde Madrid) y Resist Pro Wrestling, que no muchos pensaban sobrevivirían a la crisis del coronavirus. 

Y aunque Lucha Libre Barcelona no guarde relación directa con aquella SWA (si bien algunos de sus habituales ayudaron a impulsarla), resulta simbólico que mañana Barcelona, de nuevo, sea la gran capital luchística española

Imagen de Thank You All, último show de SWA – Solowrestling

► Una nueva esperanza

RevPro es la promotora europea más conocida a nivel mundial, muy beneficiada de su vinculación con Will Ospreay, NJPW y ahora AEW. No podía pues la lucha española albergar un mejor debut ni LLB agenciarse una mejor socia. 

Por ello, esta función que no ocupa se presenta tan importante para LLB, Triple W, Resist, RCW y toda la hermandad de casas españolas que lucen a las puertas de un paso adelante en pos acabar de profesionalizar esta disciplina sobre tierras españolas. Fraternidad, de nuevo, palabra clave no compartida todavía por muchos talentos ni medios locales (sólo cabe repasar las reacciones hacia la reciente victoria titular de Axiom), pero sí por las promotoras, tras años y años de absurdo cainismo. 

Claro que, el problema de España con la lucha libre es endémico, en una tierra día a día menos dada a disfrutar de otras formas de ocio cultural que no pasen por el fútbol, los videojuegos y (todavía, por suerte) el cine. Mientras, las artes escénicas habituales suponen un nicho de mercado muy minoritario, pero gozan de la complicidad del consumidor, quien compra su pacto ficcional y no las tacha de «falsas». Algo con lo que la lucha libre, desde el decaimiento de su popularidad en los años 70, no cuenta. 

En cualquier caso, sin tener presencia WWE en televisión (factor que ciertos analistas consideran indispensable pero que yo siempre he cuestionado), la salud que presenta el pancracio español ha superado cualquier expectativa por el trabajo y la pasión de sus implicados, en un auténtico «do it yourself» por el amor al arte. Y mañana, verán recompensada tal devoción. 

¿Será RevPro Debuts In Spain un evento pivotante en la lucha española del nuevo siglo, que definitivamente marque el inicio del establecimiento de esta disciplina allí? Cuanto menos, espero lo sea para las carreras de Barcelona Blacklist, Zozaya e Iker Navarro, quienes seguro estarán a la altura de las circunstancias. 

LA LUCHA SIGUE...
Suscríbete para recibir un resumen diario de las últimas noticias.
icon