En una de las noticias más importantes del deporte el día de hoy, el sùper talentoso y poco pensante peleador de UFC, Jon Jones, tuvo el día de hoy una audiencia ante la Comisión Atlética de California y la misma dejó grandes consecuencias en su contra.
La primera de ellas fue el hecho de que la Comisión Atlética de California lo suspendió económicamente con una multa por $205.000 dólares. Y la segunda, la más drástica, es el hecho de que su licencia como peleador profesional ha sido suspendida de manera indefinida.
Esta audiencia se debe al positivo por el esteroide Turinabol anunciado un mes después de su victoria en UFC 214 en julio de 2017 ante Daniel Cormier y la misma se atrasó tanto debido a que la defensa legal de Jones envió 15 suplementos a un laboratorio alegando que alguno estaba contaminado con esta sustancia, pero se demostró que esto no era así.
También se demostró que Jones mintió al firmar varios documentos en donde dejaba constancia que había asistido a varios cursos educativos cuando en realidad no tomó ninguno y también quedó claro que no fue sincero con la USADA en relación con el número de suplementos que estaba ingiriendo.
En definitiva, Jones no fue suspendido y la revocación de su licencia irá hasta agosto de este año, porque cuenta la suspensión de licencia realizada en ese mismo mes hace un año, y solo una vez y haya cumplido la sanción económica y suspensión de tiempo que probablemente la USADA le dará en los próximos días, se le volverá a considerar peleador de MMA.
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Jones tendrá que presentar evidencia de su proceso de cambio y rehabilitación cuando solicite otra vez su licencia y un jurado deberá decidir votando (a mayoría) si le dan la licencia nuevamente o no. La USADA podría suspenderlo por cuatro años.
El comisionado Andy Foster declaró que “espera que Jones regrese a pelear lo más pronto posible”, así que aunque su regreso en este 2018 parece imposible, aún hay una pequeña luz, como cree el Presidente de UFC, Dana White… Y con Brock Lesnar rondando por ahí…
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