Hace dos semanas confirmamos oficialmente la entrada de Molly Holly al Salón de la Fama de WWE. Quien fuera dos veces Campeona WWE y una vez Campeona Hardcore recibirá este gran homenaje a su carrera para ponerle el broche de oro y reafirmarla como una de las más grandes Superestrellas que han pasado nunca por el imperio. Por este mismo motivo desde la empresa la llamaron para ofrecerle un puesto como entrenadora en el Centro de Rendimiento, sabiendo lo mucho que podría aportar a las futuras generaciones.
► Molly Holly no quiere ser entrenadora de WWE
No obstante, Molly Holly rechazó el ofrecimiento. Así explicó sus razones para tomar esta decisión en una reciente entrevista con Talkin’ Sass:
«Me pidieron que entrenara en el Centro de Rendimiento pero simplemente no quiero. Suena bien pero estoy tan lejos de ese mundo. No quiero ser una entrenadora canosa, amargada y cansada. Tienen que tener entrenadores apasionados por la lucha libre profesional, que amen lo que hacen.
«Puedes ver a personas en las empresas independientes, o que trabajaban en WWE, o que trabajan en WWE, que se juntan y se iluminan con sus ideas… Ese es el tipo de personas que deben tener como entrenadores. Quizá en el pasado sí tenías las habilidades o la experiencia para ser entrenadora, pero ahora no estoy en un momento en que me sienta emocionada de hacer ese trabajo«.
La última vez que WWE vio a Molly Holly en su encordado fue durante el Royal Rumble 2020 cuando participó en el Rumble femenil. Aunque en realidad su carrera como luchadora a tiempo completo acabó en el año 2005; en concreto en un combate de parejas en el que unió fuerzas a Trish Stratus contra Christy Hemme y Victoria en Raw el 11 de abril. Quizá en un futuro vuelva para una aparición especial o para una nueva lucha pero no será entrenadora. Por otro lado, siempre será una Superestrella de WWE.