Fue muy curioso ver el «estilo» de pelea Logan Paul frente a Floyd Mayweather.
Cuando Logan trató, sin éxito, de golpearlo a la distancia. Cuando pudo acercarse, golpeó sin técnica y con frecuencia a los guantes de Floyd.
Si por algo no se habrá entrenado como pelea profesional Mayweather fue evidente, no hubo desafío.
Mayweather a la distancia, tranquilo, relajado, esperando a encontrar el espacio al cuerpo de Paul. Y lo encontró.
Logan Paul además hizo fintas que no le resultaron porque no estaba a distancia adecuada ni tenía una postura correcta.
Paul recurrió mucho al enganche pero se enfrentó al rey de la evasión, entonces no fue problema para Floyd sacárselo de encima para colocarle algunos golpes importantes a la cara.
Ni la edad, ni la estatura ni el peso le hicieron un favor a Paul cuando Mayweather soltó las manos, pues sacudió al youtuber con fuerza.
Con todo y que es más bajito, Mayweather acortó distancia con golpe sobre la cara de Paul. Paul sólo atinó a estirar el brazo para sacarse de encima al Money.
En el descanso del quinto al sexto round se vio a un Logan Paul cansado, que si no había caído sería por su mayor altura y peso, no por su fortaleza.
Ya para el séptimo la pelea se puso sucia. Así como demostró que podía controlarlo con golpes, Mayweather le metió los brazos a Paul cuando éste entraba embistiendo sin técnica, tratando de lastimar.
El último round fue sólo para completar el show, ya que la pelea estaba cantada del lado del Money.
Frente al público, recordemos que ese combate no fue calificado, sólo fue exhibición.
Paul cerró con un par de ridículas fintas que no le aventaron ni una ráfaga de aire a Mayweather.
Las dos esquinas festejaron triunfo, aunque fue evidente quién se desempeñó mejor. Deportivamente no ganó nadie.
Jimmy Lennon cerró la velada agradeciendo a los boxeadores por su trabajo.
Aunque realmente, ambos personajes ganaron, muchos millones, pero ganaron.