Para el peso gallo de UFC Marlon Vera, una llamada del ex campeón Dominick Cruz después de UFC Vegas 29 fue estrictamente comercial.
Vera no tiene prisa por pelear con Cruz
Cruz estaba llamando al ganador de la «Pelea de la noche» de Vera el sábado en Las Vegas y nuevamente fue puesto en aprietos por un peleador con la esperanza de aumentar sus acciones. Vera dijo que era solo una solicitud, no una demanda.
«Estaba demasiado cerca de mí, y está por delante en la clasificación. Entonces es una pelea lo que creo que es una pelea divertida, pero no estoy desesperado, o me muero por pelear. Pelearé con cualquiera, y lo probé al tomar esta pelea. Porque, seamos realistas, después de tener una pelea cerrada con José Aldo , este es un gran paso atrás, y eso es mucha presión para mí».
“Estaba subiendo al ranking con una victoria. No recibo mucho, pero me preparo muy bien, y a cualquiera que esté frente a mí lo voy a sacar, y eso es lo que vinimos a hacer esta noche”.
En marzo, Cruz se recuperó de una racha de dos peleas que lo vio ceder el título de peso gallo de UFC a Cody Garbrandt y luego no pudo recuperarlo en una pelea con el ahora ex campeón Henry Cejudo. Entre esos combates, Cruz se enfrentó a lesiones graves, un tema persistente en su carrera, que retrasó su regreso. Pero superó por puntos al destacado de la división Casey Kenney en UFC 259 para vencer las llamadas de retiro.
Desde entonces, Cruz ha tomado el puesto número 9 en el ranking de UFC y ha recibido muchas ofertas no oficiales. El No. 15 Vera, como indicó en la transmisión, no fue uno de ellos.
“Hay una larga lista de personas que me llaman. Todos estamos tratando de pelear en la clasificación, en la escalera. Tengo que respetar a alguien que está tratando de luchar por los rankings. Quiere pelear conmigo. Yo también quiero luchar por la escalera «.
Aún así, Vera fue un gran ganador el sábado por la noche, dejando a la audiencia vitoreando mientras peleaba con Grant en una sangrienta pelea de tres asaltos. A veces, parecía que las manos pesadas de Grant podrían cambiar el rumbo. Pero Vera se mantuvo fuerte y vengó una derrota de 2016 con una decisión unánime .
Luego, Vera compartió algunas (en su mayoría agradables) palabras con Cruz, quien todavía estaba en el vestidor después de una noche de trabajo en el APEX.