José Ramírez dio una genial pelea ante Amir Imam para coronarse campeón de peso superligero del Consejo Mundial de Boxeo.
Si algo habrá que reconocerle tanto a Ramírez como a Imam fue el excelente fondo físico que llevaron porque en toda la pelea se atacaron con todo.
A beneficio del público que pagó un boleto hubo muy poco tiempo muerto (por no decir nada) y el interambio entre ellos siempre prevaleció. No siempre fueron precisos pero cuando se encontraron, se dieron con todo.
La estrategia de Ramírez fue clara y evidente desde el inicio: mucho volumen de golpeo a distancia corta.
Esto con la intención de no darle espacio Imam (quien tiene los brazos más largos) de establecer su distancia en la contienda.
Fue así como dio la pauta del combate. De ida y vuelta con mucha explosividad.
Las combinaciones de Ramírez fueron de cuatro o cinco golpes y muy consecutivas. La mayor parte de ellas llegaron a destino y sacudieron a Imam. Tan así que le dejó cerrado el ojo derecho.
Además, Imam no cayó por que de verdad iba súper preparado y es muy fuerte porque Ramírez fue muy frontal.
Imam plantó la estrategia más a la distancia, por lo que se le dificultó tener encima a Ramírez, pero cuando puso la media distancia y se plantó al choque sacó muy buenos resultados en algunos rounds.
Pero el que retrocedía era Imam, señal de que la fiereza de Ramírez estaba siendo demasiada.
Con el paso de los rounds Ramírez fue más contundente, no perdió el paso ni el ímpetu de los primeros rounds. Sí, tal vez hubo una baja de intensidad, pero además de que no fue mucha, se debió al gran despliegue físico de ambos.
No quedaron a deber. Hicieron memorable la pelea 2 mil de título mundial sancionada por el Consejo Mundial de Boxeo.
Las tarjetas no dejaron duda de quién había mandado en toda la pelea: José Ramírez es el nuevo campeón de peso superligero del Consejo Mundial de Boxeo.
*Imágenes de Top Rank