Estamos viviendo quizá el momento más delicado entre WWE y John Cena en los 16 años de relaciones contractuales entre ambas partes. Lo que indirectamente, genera aún más expectación ante el gran combate rumoreado entre el rapero y The Undertaker en WrestleMania 33. «La Vitrina de los Inmortales» es el horizonte, y por ahora, parece que cualquier compromiso quedará supeditado a la cita de abril; así lo supimos ayer en relación a Chris Jericho.
Pero se abren muchos interrogantes de cara a la próxima temporada. Y la continuidad de Cena, por primera vez desde la Ruthless Agression Era, es el principal. Se cree que sus compromisos extraluchísticos, cada vez más numerosos, y su descontento por el trato desigual que recibe en comparación con otros consagrados a medio tiempo, como Goldberg y Brock Lesnar, lo están alejando cada vez más de WWE. Y es que su participación hoy en Saturday Night Live significa mucho para sus aspiraciones actorales.
A tenor de este panorama, el legendario Jim Ross habló sobre Cena en la última entrada de su blog personal, sugiriendo que el futuro podría alejarlo de la empresa de Vince McMahon.
«Parece que John Cena está viajando buena parte del mismo camino que The Rock ha tomado en su vida post-WWE, y es algo que aplaudo. Al igual que Rocky, Cena es y siempre será un hombre de WWE que seguramente no vuelva a luchar a tiempo completo —no, en mi opinión— pero siempre será leal a la compañía que le ayudó a impulsar su increíble carrera. No conozco a un luchador en su sano juicio que no cambie los golpes, las horas de carretera, etc, por la vida de una celebridad de la TV o el cine. ¿Tú no? No lo creo.»
The Rock tardó 7 años en efectuar un regreso físico a WWE después de abandonar la compañía en 2004, y ahora que ha sido reconocido como el actor mejor pagado de 2016, quién sabe cuándo volveremos a verlo sobre un ring. Lo que sí parece seguro desde hace tiempo es que no regresará a la programación regular, a menos que una debacle económica haga mella en sus cuentas. Ross supura honestidad cuando señala las aspiraciones de casi cualquier gladiador: Randy Orton ya reconoció sus futuros planes hace un par de días, por ejemplo.
Se espera que Cena regrese pronto de las grabaciones de American Grit, y la fecha idónea sería Royal Rumble (2017), a fin de atestar el Alamodome de San Antonio, Texas. Esta capacidad de llenar recintos y generar opiniones será lo que más se eche de menos en la cúpula directiva de WWE, que sin duda, hará todo lo posible para que permanezca bajo sus dominios. A tiempo reducido, Cena genera más beneficios que la mayoría de talentos actuales a tiempo completo.
Si muchos creen que WM 33 podría ser el canto de cisne del Deadman, con las recientes informaciones y las citadas declaraciones de Ross también podría pensarse que marcará, si bien no un punto y final, unos inquietantes puntos suspensivos en la carrera de Cena.