Escándalo en el deporte venezolano involucra a la lucha amateur

Hace unos días fue detenido por autoridades de Bulgaria Ovidio José Almeida, quien funge como director técnico metodológico del Ministerio del Deporte y jefe de la delegación deportiva venezolana en ese país, ya que al pretender ingresar a dicho país europeo proveniente de Madrid contaba en una maleta personal con la cantidad de 407 mil Euros.

Dicha cantidad, se supone, era para liquidar cuentas pendientes con el hotel donde los atletas venezolanos se hospedan en Sofía (tan solo se recuerda que hace unas semanas se realizaron los Campeonatos Mundiales de Luchas Asociadas en la vecina Budapest donde la delegación venezolana participó), además de pagar las becas y viáticos de los deportistas que aún permanecen en esa ciudad. Desde hace meses las delegaciones de lucha, boxeo, halterofilia y sambo hacen campamentos en Bulgaria por el alto nivel competitivo en esas especialidades.

El presidente de la Federación Venezolana de Lucha, Norman Valbuena, se manifestó en favor del detenido diciendo que todo es un mal entendido por la ausencia oportuna de un traductor:

“La persona que debía recibir la planilla de declaración en la aduana no estaba y cuando la maleta fue pasada por los rayos X, el personal de seguridad pidió explicación sobre la procedencia del dinero. Pero había un problema, no tenían un traductor.

“Hay compromisos que se deben liquidar en efectivo. En esta ocasión el dinero era para entregarles los viáticos a los atletas y cancelar parte de una deuda de más de 180.000 euros que se tiene con el hotel por la estadía y las comidas de los deportistas. Además de otros gastos. Nosotros tenemos más de ocho años entrenándonos en Bulgaria y nunca hemos tenido problemas. En la actualidad se entrenan en Bulgaria, la lucha, el sambo, el boxeo y las pesas.”

Alejandra Benítez, ministra del deporte venezolana, no ha emitido opinión alguna del caso, lo cual es preocupante, aunque Almeida ha recibido ayuda de la embajada y se encuentra en libertad condicionada, sigue en trámite la investigación que la fiscalía búlgara realiza. Si se establece que Almeida cometió una infracción, podría ser penado a pagar hasta el doble de la cantidad incautada; es decir, 814.000 euros. De no pagarlos, sería condenado hasta por 6 años de prisión, además de la mala imagen al país sudamericano que todo este asunto conlleva.