Ronda Rousey ha estado involucrada con la lucha libre profesional desde 2018, pero a lo largo de ese período ha quedado claro que no es una Superestrella completa ya que deja mucho que desear micro en mano. La ex medallista de bronce olímpico ha tenido una potente formación en deportes de contacto como el judo y las MMA, no le vamos a descubrir a estas alturas, pero en estos deportes nunca tuvo que platicar ante la fanaticada.
A lo largo de su tiempo en WWE, no ha conseguido fortalecer este aspecto de su personaje. Hacer promos no es fácil, y es algo con lo que muchos luchadores batallan a lo largo de sus carreras. Sin embargo, Ronda a menudo murmura en lugar de hablar, perdiendo la pista de sí misma, lo que causa muchos problemas.
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► Le falta mucho al micrófono
Rousey puede memorizar y decir todo lo que tiene anotado en el guion aunque a menudo hay errores que impiden que los fanáticos se involucren realmente en la historia que está contando. También, con estos fallos, se deja una puerta abierta a que otros luchadores le contesten, lo que no ayuda a su personaje. También perjudica las historias en general, ya que Ronda no tiende a agregar mucha emoción a sus comentarios. Es fría y casi robótica. Es bastante monótona en su entrega, ya que solo está centrada en sacar el contenido adelante y poco más. De ahí es de donde vienen los problemas, ya que las grandes promos se basan en la emoción, haciendo que los fanáticos conecten y sientan algo y si no que se lo digan a Cody Rhodes en su promo de regreso a Monday Night Raw. Ronda aún no ha podido hacer eso, y está empezando a dañar su trabajo.
Es por eso que WWE necesita darle un manager. Tener a alguien haciendo promos por ella eliminaría este problema, mientras que ella podría decir algunas palabras aquí y allí, puntualizar para generar confianza y desarrollar la habilidad. Está aprendiendo el trabajo, pero tener que hacer estas promos la está exponiendo de una manera que WWE debería evitar.
►Que se exprese luchando
Ronda Rousey es una ruda legítima, y eso es algo de lo que los fanáticos son muy conscientes. La razón por la que la gente se vuelve loca con ella cuando compite es por sus antecedentes, y dentro del ring, ella hace buenos combates. Es cuando tiene que contar historias con promos cuando comienzan a surgir problemas. Por lo tanto, agregarle un manager aseguraría que su lucha pudiera hablar por sí misma. Permitiría destacar su fuerza, y eso funcionaría bien. Tenerla en un escenario similar al de Brock Lesnar con Paul Heyman es el camino a seguir.
Dejar que Ronda simplemente domine, permitiéndole que se expresara luchando mientras alguien más agrega la emoción y así convertirla en algo mucho más emocionante. Ya sea Heyman u otra persona, WWE tiene muchas opciones, y agregaría mucho a su arsenal.
Rousey es una atleta especial y única, y la compañía no debe desperdiciar eso. Agregar un manager es una gran manera de evitar el problema, ya que simplemente la haría parecer una Superestrella, en lugar de alguien que no tiene confianza.
►Evitaría que su poder estelar se desvaneciera
Una gran razón por la que necesita un manager es porque evitaría que los fanáticos se vuelvan contra ella. Por el momento, el público le está dando el beneficio de la duda, simplemente porque acaba de regresar y es un gran nombre. Sin embargo, cuantos más errores cometa, menos indulgentes serán.
Este fue el caso durante su primera etapa en la compañía cuando el público comenzó a ir en su contra. Funcionó cuando WWE le pasó a ser ruda, pero las promos seguían siendo pobres. Cuando Ronda se pone nerviosa, su conversación empeora. Esta es una situación que WWE debería estar tratando de evitar teniendo en cuenta que es una de las Superestrellas más grandes del elenco.
Cualquier cosa que la haga parecer débil debería ser una situación que WWE no querría tener entre manos. Cuando hace las promos, parece que no le importa, y eso le impide brillar de la manera que debería. Los fanáticos han comenzado a captar este problema, y ese nunca debería ser el caso. WWE debe abordar esto, especialmente si Ronda se queda en la compañía más durante un periodo de tiempo prolongado.