Edwards conquistó el campeonato mosca del Consejo Mundial de Boxeo al derrotar a Cristofer Rosales.
Fue una pelea que llegó a los 12 rounds en la que Charlie Edwards demostró buen manejo del tiempo.
Usó sus pasos laterales para salir del rango de ataque de Rosales, además regresó al golpe de entrada por salida. Rosales no fue capaz de cerrarle las salidas y su golpeo fue deficiente.
Parecería que Rosales tendría un mejor desempeño debido a la batalla que le dio a Daigo Higa, pero en esta ocasión no le sirvió irse al golpe por golpe.
Pero Edwards conquistó el campeonato mosca debido a que supo manejar el ímpetu de Rosales.
Edwards metió ritmo al combate, su ritmo. Al inicio del combate se la pasó tanteando terreno, pero una vez que supo en qué rango se movía Rosales, le fue sencillo hacer su plan de combate.
Entonces comenzó a cambiar de ángulos, no con switch, pero sí con recorrido rápido sobre el ring. Le cambiaba de velocidad y de lado para ser incómodo e invisible. Rosales no pudo contestar a la misma velocidad y si golpeo fue deficiente.
Rosales parecía mandar cachetadas en lugar de impactos bien colocados, porque Edwads se le iba de las manos.
Edwards se sentía más cómodo con espacio, pues en las esquinas se le complicaba el combate. A pesar de tener la guardia bien cerrada, Rosales sí pudo conectarle algunos golpes, de modo que mejor buscó caminar por el ring para mantener su poder.
Rosales sólo pudo acorralar a Edwards en dos ocasiones importantes, el resto del combate, se la pasó corriendo y siendo golpeado por Edwards.
Al final, las tarjetas dieron el combate del lado del retador, Edwards conquistó el campeonato mosca tras 12 rounds de pelea dura y constante, en la que su oficio venció el poder de golpeo del ex campeón.