Dr. Wagner y Psycho Clown apuestan sus máscaras dos veces. ¿Fraude, inocencia o descaro?

Siendo el día del maestro, sería bueno comenzar por explicar la diferencia entre estas tres palabras que conforman el título de este artículo, pues aprender no está de más y la educación es la mejor arma contra la ignorancia.

Fraude es una actividad ilícita que requiere que una parte engañe a otra para hacerse de un beneficio de forma premeditada y aprovechándose de la ignorancia de la otra persona. Eso es un fraude.

La inocencia es la falta de maldad en la esencia de una persona. Es esa capacidad de no poder ver el mal en los actos de otros, aun cuando el resultado final no sea el mejor. La inocencia es una cualidad de los niños y un defecto en los adultos para ciertas ocasiones y momentos.

Descaro no es más que juntar las dos cosas anteriores y ofrecer a la gente algo que, con un poco de sentido común, nos damos cuenta que no pasará.

Todo esto, en relación a una nota en un medio de comunicación en México que señala con la palabra FRAUDE el hecho de que los luchadores Doctor Wagner Jr. y Psycho Clown estarán enfrentándose este año dos veces por las máscaras. La primera, el día cuatro de junio del presente año, en el evento denominado Verano de Escándalo; y la siguiente, en el evento principal de la empresa, denominado Triplemania el veintiséis de agosto.

Es cierto que esta rivalidad debe incrementarse más en cada encuentro, esos encuentros donde ambos gladiadores se encuentran sobre el ring sin nada más que arriesgar que el orgullo, la dignidad, el coraje deportivo; donde manifiesten ese odio por su rival y busquen, ante los ojos del público —que es quien hace posible que todo esto exista—demostrar quién es superior en todo momento. El público espera que su favorito masacre a su rival y lo deje ahí, en medio del ring, humillado y derrotado, mientras que sus detractores, esperan que la próxima vez el agraviado cobre venganza hasta que por fin, sin un claro favorito, se llegue a la parte culminante de toda rivalidad, que es precisamente el encuentro de máscara contra máscara.

No olvidemos que para la lucha en Triplemanía, se hizo todo un show para la firma del contrato, donde por cierto, el Doctor Wagner no llegó y la única comunicación que tuvo fue vía telefónica alegando cuestiones ajenas a su voluntad; es decir, es una lucha que se pactó con mucho tiempo de antelación, algo así como lo que hizo WWE con el encuentro entre John Cena y The Rock que anunciaron con un año de anticipación, y sólo hasta pocos meses antes fue cuando empezaron a “calentar” el encuentro (basta recordar a The Rock con su guitarra dedicándole una canción a Cena).

Aquí, en la AAA, lo que hicieron fue anunciar dicha lucha, pero nunca dijeron que no habría otras previas, por lo tanto a nadie le han mentido, y con ello dirían que esto no es un fraude, pero de verdad, ¿esperan que uno de los dos lleguen a Triplemanía sin su máscara? ¿Sería igual de atractivo un encuentro de máscara vs cabellera? Así que sería muy INOCENTE creer que esto pasaría, pero la gente comprará su boleto para ver ese encuentro previo y habrá quienes en algún momento de verdad crean que uno de los dos puede perder ahí, pero no, no sucederá, no en ese encuentro, no ese día, no así.

Y entonces, ¿por qué llevar a cabo ese encuentro? Que uno de los dos pierda sería darle al traste al encuentro principal del evento más simbólico de la empresa, y todo se reduce a una mala idea de proyectar e incrementar esa rivalidad para que en Triplemanía toda la atención esté centrada en ver quién es el ganador de este encuentro, que muchos ya se están saboreando, y quizás por eso la empresa ha decidido dar una pequeña probada, pero no permitirán que el plato principal se coma antes de tiempo.

En un espacio donde otro será el sacrificado y veamos una incógnita caer, mientras los mencionados Doctor Wagner Jr. y Psycho Clown saldrán quizás con las máscaras rotas, ensangrentados, lastimados, pero con su identidad aún oculta del dominio público, darán una serie de declaraciones donde dirán que uno quiso acabar con el otro, y que esto, sólo es, precisamente, una probadita de lo que viene a continuación en Triplemanía. Ése es el escenario lógico. Y aunque la lógica no es algo que tenga mucho que ver en la lucha libre, si es algo que debe prevalecer en un negocio, y para AAA, la lucha libre es eso, un negocio.

Así que en mi muy particular punto de vista, no, no hay fraude, porque habrá gente que pague su boleto aún entendiendo que ninguno de los dos va a perder su máscara en Verano de Escandalo, y seguramente el lugar donde se lleve a cabo dicho encuentro estará lleno y los gritos de apoyo para cada uno de estos dos luchadores hará que parezca que el recinto se caerá cuando salgan bien librados de su encuentro, lo cual opacará por mucho el encuentro final donde alguien perderá su incógnita.

Pero a nadie se le engañó, ellos estarán participando en ese evento y nadie puede decir si todo saldrá como se planeaba. Quienes actúen con lógica simplemente irán para comprobar que efectivamente, ni Wagner ni Psycho Clown perderán su máscara, y aunque bien pudieron verlo por televisión, no iban a perder la oportunidad de disfrutar la lucha en vivo, algo que se agradece en estos días donde hay arenas vacías y grandes encuentros sin testigos, así que gastarán su dinero en algo que de forma consciente saben que no pasará, así que no, nadie los ha engañado y no, no hay fraude por ello.

¿Inocencia? Sólo de algunos quizás, de los más pequeños, de los menos críticos, de los que su fanatismo no les deja entrar en razón, de aquellos que consideran que como lo he dicho, todo puede pasar. No, no es malo ser inocente, por el contrario, se necesita en este mundo —no solo luchístico—que haya más inocencia y menos maldad, porque los malos se aprovechan de los buenos, porque los malos son los que se benefician con esa inocencia, porque son los malos los que le venden al inocente aire en una botella y éste la conserva como el más valioso de sus tesoros.

Ser inocente no es malo, sin embargo no aprender la lección sí, porque la inocencia de forma desmedida es aún más peligrosa que la propia ignorancia. Esto es lucha libre, y hay que entenderlo así. Debajo de cada personaje, hay un ser humano que lo único que hace es brindar su trabajo a quienes pagan por ello, en este caso al público, pero siempre, en función de las necesidades de quienes los contratan, en este caso, en atención a los intereses de la empresa conocida como AAA.

Pero no, no serán los inocentes los que llenen el recinto, sino los que con morbo estarán esperando ver la forma en la cual sus ídolos saldrán bien librados de este encuentro, donde como ya dije, saldrán con las máscaras rotas, lastimados, ensangrentados, pero con la mano en alto y la incógnita a salvo. Ellos no conciben en su cabeza que alguno perderá, porque entienden el negocio y saben que si esto pasara, Triplemanía no tendría la misma atención, y que mucha gente preferiría mejor ni ir, pero Triplemania tendrá un encuentro de máscara contra máscara con los involucrados, esto no va a cambiar, así que de forma inocente, vamos a pensar que se respetará la estipulación de que será en mano a mano, sin un tercero que intervenga y que en Triplemania se conocerá el rostro de un ídolo.

¿Descaro? Sí, todo el posible, habido y por haber dentro de la industria de la lucha libre, porque con esto están dejando abierta la posibilidad de que la gente comience a especular que la lucha libre está arreglada en caso de que ambos luchadores salgan victoriosos del evento Verano de Escándalo, porque de no ser así, no tiene ningún sentido involucrarlos en un duelo donde sus incógnitas estén en juego, no tiene caso exponerlos a que sea otro el que se lleve la gloria de destapar al Doctor Wagner o al Psycho Clown. La gente quiere ver a estos enfrentándose uno a uno, quiere ver cómo se lastiman, cómo se hacen daño, cómo buscan acabar uno con el otro en esa rivalidad deportiva que debe existir dentro de un ring; pero no, decidieron por cuestiones meramente de marketing y económicas integrarlos a un evento apostando junto a otros sus máscaras, y además, los ponen como referencia de ese encuentro, porque son taquilleros, porque son ídolos, porque la gente los conoce, los sigue y quiere verlos sobre el ring, pero es sin duda una maniobra muy descarada por parte de la empresa AAA. Ellos se asegurarán que ninguno de estos dos pierda su máscara en Verano de Escándalo; será AAA, la encargada de buscar la manera en que ambas incógnitas permanezcan hasta llegar a Triplemania: será la AAA la que buscará cómo sacar el máximo provecho de esta situación para su propio beneficio; será AAA de quien se hable por este encuentro y por la forma en la cual ha decidido exponer que la lucha libre ha perdido su inocencia.

Por todo lo anterior, queda claro que solo saldrán defraudadas las personas en cuya inocencia radicaba el hecho de que pudiera existir la más mínima posibilidad de que en Verano de Escándalo, el Doctor Wagner diera a conocer su rostro, o donde el Psycho Clown se despojara de su máscara. No, no va a suceder, y no porque aquí se tenga el don de la clarividencia; no, es sólo que no se puede concebir en ningún momento que una empresa pueda echar a perder ella misma un evento por el cual piensa beneficiarse económicamente de una manera mucho más amplia que con lo que se obtenga de entradas y demás ingresos en su evento denominado Verano de Escandalo; simplemente es algo que no hay forma de concebir, y ahí se verá reflejado el descaro con el que una empresa juega con las emociones y hasta sentimientos de los aficionados; ahí se verá que lo que importa en realidad es sacarle el máximo provecho a esta rivalidad antes de que llegue a Triplemania; ahí se verá como la lucha libre perdió su inocencia, pero ganó en morbo y en crear expectativas que van fuera de la realidad.

LA LUCHA SIGUE...
Suscríbete para recibir un resumen diario de las últimas noticias.
icon