En 2018, Canelo Álvarez revolucionó la industria del boxeo con la firma de un contrato que ningún otro boxeador ha alcanzado.
Firmó un contrato por 356 millones de dólares por 11 peleas. En ese año fue el atleta mejor pagado del planeta y no había un contrato más alto que ese en ningún deporte.
Pero desde entonces, sólo ha cumplido con 3 combates.
Esto porque las actividades deportivas (todas, de cualquier tipo que no fueran esenciales) pararon por completo cuando en febrero se declaro que el COVID-19 es una pandemia.
Así que la fecha de la pelea que normalmente Canelo, anque trató de salvarse, se perdió.
A estas alturas y con lo sucedido, la de septiembre también.
Y es que Canelo no está contento con que cada que sugiere un rival para pelear, se lo rechazan.
Su demanda contra DAZN y contra Golden Boy está basada en el hecho de que acusa a estas dos empresas no darle opciones de pelea.
Aunque con opciones se refiere a que no le han aprobado los rivales que él ha puesto en la mesa.
Eso sí, Golden Boy a través de ESPN ha espresado que aquí el problema es directo con DAZN y no con ellos, porque GBP ha estado de acuerdo con lo que Canelo ha mostrado.
Dmtry Bivol, Billy Joe Saunders, Avni Yildirim… y con ninguno prosperó el asunto.
Principalmente, Canelo menciona que los implicados piden mucho dinero por enfrentarlo.
Además DAZN se niega a darle espacio en su programación si no enfrenta a alguien de élite, como es el caso del combate ante Avni Yildirim por el cinto supermediano del CMB.
La cosa con Saunders es que cuando por fin se estaba cuajando la pelea, le dio por subir un video en el que enseñaba cómo golpear a tu mujer, y lo suspendieron.
Yildirim no es un boxeador conocido.
Casi, casi, a Canelo lo están forzando a que haga la trilogía con Gennadyi Golovkin, pero Álvarez no quiere.
Eso y que, aunque su contrato ampara 35 millones por pelea, el rumor apunta a que en los contratos que le han presentado le han ofrecido menos dinero.
Así que por eso la demanda.
¿Quién ganará?
O mejor dicho, ¿a qué acuerdo llegarán?