 – En vivo desde WrestleMania 33){kind=link}
En la noche de ayer, 30 de marzo, WWE Network presentó una nueva edición de un de sus programas originales, Bring it to the Table, con el atractivo especial de ser emitido en vivo desde el Camping World Stadium, donde este fin de semana tendrá lugar WrestleMania 33.
Peter Rosenberg estuvo al lado de los habituales JBL y Corey Graves. Este último fue increpado por su negativa al encuentro entre Shane McMahon y AJ Styles. Al respecto, Graves dijo que conversó con Shane sobre esta lucha, pero prefirió guardarse lo que habían hablado.
Esta no fue la única opinión poco ortodoxa de Graves, pues también dijo preferir la división femenil de SmackDown y el manejo que las mujeres han tenido en esta, su marca rival. El panel también se mostró emocionado por la construcción que ha tenido el encuentro mixto de SmackDown y el realismo que ha impregnado esta rivalidad.
JBL expresó su decepción por no tener una lucha por el Campeonato de Parejas SmackDown y condenó el hackeo que sufrieron algunas Superestrellas WWE.
Al analizar el Andre The Giant Memorial, JBL reveló un interesante dato sobre el kickoff de WrestleMania:
El pre-show del año pasado tuvo 5 millones de visitas. Ese pre-show es una de las propiedades más valiosas que WWE tiene. Yo suplicaría por estar en ese pre-show.
Los panelistas también discutieron sobre Roman Reigns y la manera ridícula, según su punto de vista, en que la gente se le ha opuesto cuando en principio lo ovacionaban y él sigue haciendo un buen trabajo como Superestrella.
En el terreno de la fantasía, consideraron una lucha entre The Rock y Vin Diesel para WrestleMania 34, con un acuerdo unánime en que The Rock patearía el trasero de su compañero de Fast & Furious.
Hubo otros temas que tocaron rápidamente, como la negativa de Shawn Michaels a enfrentar a AJ Styles, el rol de The New Day como anfitriones y la presentación musical de Pitbull y Flo Rida.
Para cerrar, se discutió cuál lucha debería cerrar WrestleMania. Al respecto, Corey Graves mostró una posición conservadora al preferir la lucha por el Campeonato WWE, pero JBL, siendo uno de los mayores aficionados de The Undertaker, eligió su encuentro ante Roman Reigns. Rosenberg, por su parte, eligió a Goldberg y Lesnar.
Vale la pena resaltar que durante todo el programa se señaló, no siempre de manera positiva, la enorme cantidad de luchas en el cartel de este WrestleMania.
Con esto terminó la tercera edición de Bring it to the Table, tan interesante como siempre.