Una noche tranquila y sin aparentes peligros naturales fue la que se vivió en pasado lunes 11 de septiembre por la noche en la capital angelopolitana, para que los fieles fanáticos al deporte del costalazo presenciaran en la Arena Puebla un duelo generacional donde leyendas vivientes y nuevos ídolos compartían el mismo ring.
Por Carlos García Hernández — Fotos de Ricardo Rodríguez
Los nuevos aficionados y los seguidores de hueso colorado pudieron presenciar en el cuadrilátero del coso poblano a Octagón, Carístico, y Volador Jr., por parte del bando técnico, para enfrentar a los rufianes, Negro Casas, Gran Guerrero y Kojima durante la batalla estelar de la noche, misma que fue regulada por el réferi «El Tirantes».
Después de las presentaciones correspondientes, comenzaron las acciones, como lo dictan los cánones luchísticos. Las llaves y contrallaves deleitaron al público asistente, pero los rudos, ni tardos ni perezosos, pusieron el desorden abaratando a los técnicos con la permisiva del réferi. Pronto el Gran Guerrero y Kojima neutralizaron a Octagón y Volador Jr, dejando a Carístico a merced del «Maraquero» Negro Casas, quien con una casita le otorgó la primera ronda a la tercia de rufianes (puesto que el ex-príncipe de plata y oro era el capitán) para algarabía de toda la fanaticada ruda.
En medio de la rechifla y con el descontento del respetable, los técnicos tomaron un respiro para devolver la afrenta. Viniendo de atrás y utilizando lucha área, comenzaron a mermar a los rudos sobre el rombo de batalla, mostrando la espectacularidad que los caracteriza. El público se les entregaba ovacionando el juego de cuerdas. Después de un tope suicida de Octagón sobre el Gran Guerrero y una patada a la filomena y estacas a la espalda de Volador Jr. a Kojima, Carístico devolvía la cortesía al Negro, y con una casita, los técnicos empataban la contienda.
Con el público dividido apoyando a sus gladiadores favoritos, la tercera caída dio inicio. Los seis contendientes salieron con todo para llevarse la victoria, pero nadie soltaba prenda a pesar de los castigos y las evoluciones tan efectivas sobre el encordado. Por instantes, los rudos dominaban a base de fortaleza y marrullerías, pero la tónica del cuerdeo y la velocidad de los técnicos contrarrestaba los embates rufianes. Un par de mortales hacia afuera del ring de Volador y Carístico, dejaron que Octagón y el Negro Casas definieran la batalla, Y con una escalera, el «Amo de los Ocho Ángulos» le daba el triunfo a su equipo.
RESULTADOS:
1- Meyer, Centella Roja e Hijo de Centella Roja vencieron a Ares, Fuerza Chicana y El Perverso.
2- Disturbio, Canelo Casas y Espanto Jr. vencieron a Tigre Rojo Jr., Arkalis y Rey Samurai.
3- Vangellys, Misterioso y El Sagrado vencieron a Stigma, Blue Panther Jr., y The Panther.
4- Ángel de Oro, Kráneo y Valiente vencieron a Johnny Idol, Felino y Bárbaro Cavernario.
5- Octagón, Carístico, y Volador Jr. vencieron a Negro Casas, Gran Guerrero y Satoshi Kojima.
No hay nada mejor como la lucha libre mexicana.
No hay nada mejor como la lucha libre mexicana.