Este artículo refleja las opiniones personales de su autor, y no necesariamente las de la Revista Súper Luchas.
Bienvenidos de nuevo a esta columna en la que busco presentar los que, en mi opinión, son los 5 aspectos positivos y negativos de los PPV de WWE, en este caso Extreme Rules 2015. Tras un WrestleMania 31 que sorprendió y agradó a los aficionados, Extreme Rules debía ser una herramienta que frenara la caída en la audiencia propia de esta temporada. En mi opinión fue un evento mediocre, que no ofreció mucho para ser recordado y en donde las mejores luchas vinieron de lugares inesperados.
Empecemos con lo mejor y lo peor de Extreme Rules 2015:
Lo peor:
5- La jaula de acero: Esta era la primera defensa de Seth Rollins tras su histórico canjeo del maletín Money in the Bank, su revancha tras un buen encuentro contra Randy Orton en WrestleMania 31 y posiblemente el momento en que se definiría su disputa con Kane, además todo estaba ambientado dentro de una jaula de acero, así que debería haber sido un gran momento, pero no lo fue. La lucha entre Rollins y Orton por el Campeonato Mundial de Peso Completo de WWE fue anticlimática. Rollins, quien claramente será un campeón tramposo y cobarde, lo que no necesariamente es malo, se vio totalmente dominado y por tanto débil. Orton dio una lucha como las que acostumbra a dar, y a pesar de la prohibición del RKO, no mostró mucho más de su repertorio habitual, como si lo hiciere contra él Shawn Michaels en Survivor Series 2007, donde no podía usar la Sweet Chin Music. Por su parte, Kane quedó debiendo respecto a su situación con The Authority y su intervención fue más de lo mismo que habíamos visto en las últimas semanas, perdiendo el control, atacando a Rollins y J&J Security pero haciendo al final lo mejor para los negocios. El final con un RKO de Rollins fue interesante, pero es poco probable que se le saque partido.
4- Russian Chain… y luego I Quit: John Cena y Rusev tuvieron un encuentro decente en FastLane, una lucha promedio en WrestleMania 31 y un encuentro aburridor en Extreme Rules, por lo que para Payback las expectativas no deberían ser muy altas. En lo personal, las luchas de correa y todas sus variedades son encuentros que en su mayoría son poco interesantes y donde la manera de conseguir la victoria tiene una emoción nula. Tras un encuentro donde ni el ganador ni el perdedor obtuvieron beneficio alguno, viene otra lucha que de seguro dará un gran golpe a la credibilidad de Rusev, un I Quit, donde las probabilidades indican que Rusev, no solo saldrá derrotado por tercera vez, sino que tendrá que rendirse ante miles de personas.
3- Las divas siguen sin ser interesantes: Es difícil saber a ciencia cierta en este punto qué se debería hacer con la división femenina de WWE sin tener que empezar de cero. Aunque muchas de las divas son capaces de dar buenas luchas en las condiciones adecuadas: Natalya, Paige, Naomi, Emma, Layla o Nikki Bella (sí, Nikki Bella puede dar buenas luchas), lo cierto es que ni siquiera el cambio a ruda de Naomi, su ataque y lesión a Paige y su usurpación de la posición de retadora lograron hacer que esta lucha despertara mayor interés. Aunque en NXT la situación es harto distinta, es poco probable que las cosas cambien cuando Charlotte, Sasha Banks o Bayley asciendan. Las divas no despiertan emoción desde el debut de Paige hace un año y #GiveDivasAChance sirvió para poco y nada.
2- Las lesiones de Daniel Bryan: El campeonato intercontinental no pudo ser defendido en Extreme Rules, y aunque es una pena, no se puede forzar a un atleta a competir cuando su salud peligra. A eso se remite este punto. Este es el noveno PPV que Daniel Bryan se pierde debido a una lesión en el último año, y aunque en Royal Rumble regresó aparentemente mejorado de su lesión, lo cierto es que la presión que existe sobre Bryan, bien sea por parte de WWE o de él mismo, ha hecho que la preocupación sobre su bienestar reaparezca. El campeonato intercontinental también se ve perjudicado, y aunque la salud de Bryan es prioridad, no se puede tener un campeón que se ausente del ring para ir al hospital. Si Daniel Bryan necesita mayor tiempo de recuperación, que así sea, pero forzar su regreso es un riesgo innecesario y que su estilo de lucha ponga en riesgo su salud es algo que también se debe evaluar.
1- Evento irrelevante: ¿Hay algo, cualquier cosa, que haga que Extreme Rules 2015 sea recordado? La respuesta es no. Extreme Rules se construyó alrededor de los restos de las rivalidades de WrestleMania, y aunque hubo oportunidades de robarse el show, como la Street Fight o el inestable estado de Kane, lo cierto es que fue «un show más» y será olvidado tan pronto como se conozca el evento principal de Payback. La noche más extrema del año debería ser recordada, pero poco y nada nuevo vimos en la Allstate Arena.
Lo mejor:
5- Lucha callejera: Debo confesarlo, el street fight entre Dean Ambrose y Luke Harper no fue en absoluto una de mis luchas favoritas de la noche, pero considero justo darle crédito. Por un lado Dean Ambrose tuvo su primera victoria en PPV tras la ruptura de The Shield, después de salir derrotado de nueve eventos. Adicionalmente, Harper y Ambrose se arriesgaron a hacer algo distinto y durante cerca de media hora continuaron su lucha en un automóvil por las calles de la ciudad, cosa que de seguro enorgulleció a Roddy Pipper y Goldust. Sin embargo, mi percepción es que este encuentro prometía más de lo que entregó y a pesar de las conocidas limitaciones de la compañía, Ambrose y Harper pudieron haber dado un encuentro mucho mejor que el que vimos.
4- The New Sensation: Apenas unas semanas después de su debut en el roster principal, Neville se ganó un apodo que se ha esforzado por mantener, «The New Sensation». La Nueva Sensación se enfrentó a Bad News Barret en el kickoff del evento y volvió a sorprender con sus movimientos aéreos mientras el público coreaba «NXT!». Neville venció al contendiente #1 al campeonato intercontinental, y ha logrado estar a la altura de rivales como Dolph Ziggler, Sheamus y el campeón mundial de peso completo WWE, Seth Rollins. De seguir así, el futuro es brillante para él.
3- Kiss Me Arse: Era casi seguro que Sheamus llegaría a ganar en su primera lucha en PPV desde su regreso pero, sorpresivamente, no fue así. Dolph Ziggler venció al irlandés y, por tanto, no hubo mayor daño a su estatus, pero Sheamus se negó a cumplir con lo prometido y tras un golpe bajo obligó a Ziggler a besarle el trasero. Ambos dieron una buena lucha, como es usual cuando se encuentran en el ring, y mientras en los registros quedará la victoria de Ziggler, en la memoria quedará la humillación propinada por Sheamus. Una lucha donde los tres ganaron: Ziggler, Sheamus y el público.
2- Campeonato de Parejas: Quizá la lucha menos esperada de la noche, de hecho iba a ser parte del kickoff, y la que más ofreció a nivel de lucha en el ring, además de una sorpresa. Poco hay que decir que no se sepa ya sobre el talento de Cesaro y Tyson Kidd individualmente y como pareja, por su parte Kofi Kingston ha sido por años uno de los highflyers más destacados y Big E es imponente como pocos. La combinación fue un éxito y la lucha por el Campeonato de Parejas WWE tuvo un buen ritmo donde los estilos de todos los luchadores se combinaron de gran manera. Natalya y Xavier Woods apenas intervinieron, lo cual es bueno, y el encuentro cerró con la gran sorpresa de que los poco populares New Day acababan con el reinado de los talentosos Kidd & Cesaro. Como ocurrió con Bo Dallas y su reinado en NXT, el molesto rol de técnicos de New Day los convirtió en unos odiados rudos. Pero mi predicción es que Cesaro y Kidd verán el oro de nuevo muy pronto, y si no entonces serán The Lucha Dragons, de cualquier manera el nuevo día de New Day no durará mucho.
1- El último hombre en pie: Quizá sea este el punto que más desacuerdo genere, pero en mi opinión Roman Reigns y The Big Show fueron los únicos que llevaron lo extremo a Extreme Rules. Esta era, en lo personal, la lucha de la que menos esperaba y por tanto fue grato ver que Big Show y Reigns encontraban, por fin, algo de buena química en el ring. En un Last Man Standing, incapacitar al oponente por diez segundos no es tarea fácil y eso fue lo que demostraron estos luchadores, Reigns recibió un Spear, chokeslam y K.O. Punch pero siempre pudo ponerse en pie, Big Show también recibió varios Superman Punchs y spears, uno de los cuales lo mandó contra la mesa de comentarios; además ambos rompieron mesas con su cuerpo, pero siempre lograban ponerse en pie. Al parecer es este estilo de dureza el que más favorece a Reigns en el ring, como lo ha demostrado en los tres últimos eventos, por su parte Big Show es una leyenda viviente y puede dar grandes luchas cuando menos se espera, como pasó en Hell in a Cell 2012 contra Sheamus, en una lucha con un estilo muy similar a esta. La victoria de Reigns al final fue parecida a la que tuvo Alberto Del Rio a inicios de 2013 cuando ganó el campeonato mundial, o la de Cena sobre Bray Wyatt, pero el gran esfuerzo y resistencia de los minutos anteriores le dio credibilidad adicional.
Gracias por detenerse a leer, recuerden que esta es mi opinión personal y que pueden opinar con sus comentarios.