El primer asalto lo dominó Weidman, pero en los últimos segundos estuvo a punto de ser noqueado después de un gran directo de Gastelum. Los jueces tuvieron que decidir si valen más los 4:40 minutos del ex campeón o los últimos 20 segundos de su rival. Ciertamente Weidman fue mucho mejor utilizando la lucha, pero cuando intercambiaron golpes, Gastelum, aunque no lanzó muchos, demostró mayor poder de golpeo.
El segundo asalto fue similar al primero, aunque Weidman no le dejó los últimos segundos a Gastelum, por lo que también lo ganó. El ex campeón dominó con su lucha y su juego de piso, muy superiores a las de su rival.
En el tercer asalto, después de haber hecho el mismo maravilloso trabajo de lucha y juego de suelo, después de un gran intercambio que también ganó, Weidman consiguió hacer rendir a Gastelum para conseguir una genial victoria. Excepto los últimos veinte segundos del primer asalto, el ex campeón fue totalmente mejor que su rival.
Chris Weidman derrotó a Kelvin Gastelum por rendición.