Se puede hablar mucho de la revolución de las divas, pero pocas personas son tan calificadas para hablar de una verdadera revolución en la lucha libre femenil como Trish Stratus. La bella canadiense que llegó a principios del 2000 a la WWE, primero como manager de T & A y que después saltara al cuadrado que delimitan doce sogas para revolucionar la lucha libre femenil, tanto con su accionar luchístico como con sus despampanantes curvas. Precisamente un día como hoy, 18 de noviembre, pero de 2001, durante el Survivor Series, WWE decidió reactivar el Campeonato Mundial Femenil haciendo una batalla entre seis divas para coronar a una nueva monarca, pues Chyna había abandonado la empresa llevándose el título. Así, Trish Stratus, Jacqueline, Lita, Ivory, Mighty Molly y Jazz batallaron por el título siendo Stratus la triunfadora, una historia que continuaría y repetiría en siete ocasiones.
Trish no sólo fue una cara bonita y un cuerpo hermoso, sus capacidades atléticas demostraron que con el entrenamiento adecuado pudo llegar a ser una luchadora más que aceptable capaz de hacer lances y castigos espectaculares, haciendo de ella alguien a la que difícilmente se le pueda cuestionar en lo que piensa y su opinión cuenta, y cuenta mucho, por tal motivo, ayer en su página oficial publicó su sentir sobre lo acontecido el pasado sábado y el lunes:
«Muchos de ustedes han estado pidiendo mi opinión sobre Ronda Rousey -la cual no ha cambiado… ella es todavía la mejor peleadora del mundo, sigue siendo una pionera, sigue siendo un factor de cambio para las atletas no sólo para las mujeres de los rings, sino para todas las atletas, ella todavía se convertirá en campeona de nuevo, volverá más feroz, más fuerte, con más hambre, más sabia.
«Simplemente estoy disfrutando el hecho de que estamos teniendo conversaciones acerca de las mujeres que se están matando en los deportes dominados por los hombres. Y, al verlas cruzar al ring como lo hicieron ayer por la noche fue un momento increíblemente inteligente por parte de la WWE. Muchas felicidades a Paige y Charlotte por ganar su lugar en el evento principal. Un logro bien merecido que ambas demostraron estar listas para eso.
«Lo que sigue para las mujeres, es el momento para nosotras, ver a las damas del roster actual conseguir una lucha estelar en un PPV – es claro que están listas, y nosotros también. Además, poner a sus mejores atletas en el evento principal es lo que mejor hace la WWE, el género no debe ser un factor.
«Aquí están las más pateatraseros dentro y fuera del ring, y servirá para que más damas que luchan puedan demostrar que merecemos el mismo respeto, reconocimiento y oportunidades que nuestros homólogos masculinos en la misma industria. !Dios sabe que luchamos y trabajamos tan duro para esto!»
