Uno de los momentos más épicos que nos dejó la última edición de WrestleMania fue el que tuvo a «Stone Cold» Steve Austin, Shawn Michaels y Mick Foley en conjunto compartiendo el ring para deshacerse de La Liga de las Naciones.
El segmento tuvo un cierre con broche de oro cuando los New Day invitaron a los tres miembros del Salón de la Fama a bailar con ellos, a lo que Austin respondió con su icónico Stunner para cerrar con unas cervezas al más fiel estilo de la Serpiente Cascabel.
Pero lo que nadie imaginó en ese entonces es que aquel mismo segmento, en palabras del ex Campeón Mundial Completo WWE, posiblemente haya sido su última aparición sobre un cuadrilátero.
Durante su visita al podcast You’re Welcome! con el ex peleador de UFC Chael Sonnen, Austin —que también se mostró un tanto desilusionado con su papel en la trigésima segunda entrega del magno evento—ha hecho estas declaraciones que tomaron a todos por sorpresa:
Fue bueno ir allí a Dallas, Texas para WrestleMania 32. La situación pudo haber sido un poco mejor, pero fue divertido hacer negocios con esos chicos [New Day y LON]. El público fue espeluznante. Espero que todos lo hayan pasado bien.
No sé cuándo será la próxima vez que vaya a pisar un ring de WWE, puede que esa haya sido la última. Quería que fuera allí en Dallas, Texas en WrestleMania 32. Aunque [su último combate] fue con una capacidad menor porque nunca anuncié mi retiro, me considero a mí mismo retirado.
Así que salir enfrente de 97.000 o 101.000 personas, como fuese que WWE haya dicho que fueron… esa es la ciudad donde empecé mi carrera como luchador profesional cuando luché en el mundialmente conocido Sportatorium, así que fue un momento grandioso».