Por Gladys Trujillo
Marina Shafir es una prometedora peleadora de artes marciales mixtas que además de ser amiga de Ronda Rousey, entrena con la campeona gallo de UFC. Ambas forman parte de un equipo de entrenamiento que es conocido como «Four Horsewomen» o «Las cuatro jinetes», conformado además por Shayna Baszler y Jessamyn Duke.
Marina Shafir tiene una carrera amateur impresionante (ganó todas sus peleas por la vía del nocáut en el primer round), lo cual hizo que las expectativas respecto a su potencial se dispararan y que su carrera, se comparara con la de Ronda. Las comparaciones surgieron porque Marina también sella sus combates con la palanca al brazo, movimiento firma de Ronda Rousey.
Sin embargo, Marina Shafir ya no está invicta. El pasado 10 de agosto perdió por sumisión a los 37 segundos del primer round en el combate que sostuvo con Amanda Bell. Pronto la opinión pública se vertió sobre ella. Tal vez las personas se ensañaron con ella porque antes del combate con Amanda, ya se había declarado lista para enfrentar a mujeres de la talla de Cris Cyborg y Gina Carano.
Pero su compañera de equipo salió a su defensa y escribió lo siguiente en su cuenta de Instagram, en apoyo a su compañera:
«El comienzo de un camino es como leer un buen libro… para el protagonista el comienzo puede ser duro o perfecto, a la mitad puede ser desafiante y a veces insoportable… pero es el final el que cuenta. Es el destino lo que te hace mirar atrás y agradecer todas las cosas difíciles que se interpusieron en tu camino. Las quiero chicas, aprecio cada segundo que he tenido para admirar su camino hacia la grandeza», fueron las palabaras de Ronda para su amiga.
Tampoco es demasiado grave que Marina Shafir haya perdido un combate. Es su segundo combate profesional y a los 26 años lo que le sobra es tiempo para respaldar las buenas cosas que realizó en amateur.