Niko Price cree que la mejor manera de mostrarle respeto a Robbie Lawler en su pelea de retiro es enviándolo con una derrota.
El ex campeón de UFC Lawler (29-16 MMA, 14-10 UFC) está listo para alejarse del deporte luego de la pelea de peso welter del sábado con Price (15-6 MMA, 7-6 UFC) en UFC 290 de T-Mobile Arena. Sirve como las preliminares destacadas en ABC, ESPN y ESPN+ antes de la cartelera principal de pay-per-view.
Siempre es una tarea complicada para el oponente reservado contra un grande de todos los tiempos cuando se despide de MMA, pero para Price, no es exactamente una situación nueva. También luchó contra Donald Cerrone al final de su mandato en UFC, por lo que se siente cómodo en este lugar.
“Es solo otra pelea. Tengo que luchar contra algunas leyendas. No es nada nuevo para mí. Es un oponente y voy a tratar de entrar y golpearlo en la cabeza”.
Independientemente de las historias que se presenten en UFC 290, esta es una pelea crítica en la carrera de Price. Tiene solo una victoria en sus últimas cinco apariciones en el octágono desde mayo de 2020 y está bajo cierta presión para hacer el trabajo y mantener una buena posición en la promoción.
También es importante para Price estar en condiciones de seguir recibiendo asignaciones como la de Lawler. Disfruta mucho enfrentarse a los mejores y más grandes nombres de MMA, y si quiere más oportunidades, necesita demostrar un punto.
“Si llega una clasificación, no estoy llorando, pero quiero pelear contra todas las leyendas. Quiero ser el captador de leyendas, no el asesino de leyendas. Sólo quiero entrar allí con todos ellos. ¿Quién sabe qué sigue? Solo Dios sabe la respuesta a esa pregunta. Pero estoy listo para cualquiera de ellos”.