Ya está a contrarreloj la pelea titular de que Lucas Matthysse tendrá contra Viktor Postol.
Postol fue desairado por Danny García, era su retado oficial pero lo dejó en espera porque tomó varias peleas voluntarias y al final declinó los títulos y subió a categoría welter.
Matthysse estuvo a pocos rounds de vencer al propio García, sin embargo un golpe certero le cerró el ojo y le impidió ver bien el resto del combate y García se lo comió vivo. Luego se negó a darle la revancha argumentando que Matthysse no le había representado reto, lo cierto es, que hasta que se le cerró el ojo, el argentino le había hecho pasar mala noche al estadounidense.
Una vez fuera Danny del panorama, se pactó de inmediato la pelea entre Matthysse y Postol por el cinto súper ligero del Consejo Mundial del Boxeo que García había acaparado (y no había defendido en más de un año).
Ahora, Matthysse ya está instalado en California para cumplir con la pelea que podría darle su primer título mundial. Y vaya que se ganó la oportunidad a pulso. Sus guerras contra John Molina y el poderosísimo Ruslan Provodnikov lo colocaron como el contendiente directo de Postol (clasificado número uno por el CMB) por el cinto ahora vacante.
Por lo pronto, Lucas cumplirá con los últimos compromisos promocionales de la pelea y cerrar detalles estratégicos de cara al combate.
«Es un rival que está primero en la división, está invicto, es alto, mide 1.80 metro. La verdad que venimos entrenando bien. Tengo unos sparrings de 1,84 metros, 1,85, dos o tres divisiones más arriba que la mía, así que venimos bien preparados”, comentó Lucas, quien llegó a Estados Unidos con su equipo completo, compuesto por el técnico Luis ‘Cuti’ Barrera, el entrenador Juan Martín ‘Látigo’ Coggi, el preparador físico Matías Erbin y el médico Eduardo Leguizamón, además del promotor Mario Arano.
Nota la pie: Es hora de que Matthysse complete su oportunidad al título con el cinturón ceñido a la cintura. Aun cuando la derrota ante García fue fortuita, una derrota ante Postol lo haría retroceder un par de pasos de cara a otra afrenta titular.