Luke Rockhold reacciona a lesión que provocó que se detuviera la pelea de Poirier contra McGregor

Después de ver la desagradable lesión que sufrió Conor McGregor en UFC 264, Luke Rockhold se dio cuenta de que había estado en una situación similar antes.

Rockhold estaba viendo la pelea de McGregor con Dustin Poirier mientras se conectaba a VersusGame, una aplicación donde los fanáticos pueden hacer apuestas basadas en predicciones y opiniones. Mientras contemplaba el ambiente de la pelea, se dio cuenta de que su predicción en la aplicación se hizo realidad y, sin embargo, estaba sorprendido por las X y las O de cómo se desarrolló la pelea real.

«Lo vi, y mi apuesta fue el más / menos de tres rounds, No puedo dar una opinión exacta, pero asumí que [terminaría] antes que eso, como lo hizo. Quiero decir, nadie puede predecir que el maldito Conor se romperá la tibia».

Me sorprendió que Conor desperdiciara eso, pero tal vez saltó la guillotina porque se lastimó la pierna antes y fue en ese ángulo. Dustin entró y luchó, lo mantuvo boca arriba y Conor necesita aprender a levantarse. Ese es el juego. Pero nunca se sabe, podría regresar, reiniciarse, su tibia se rompió y ese es el juego de la pelea. La gente no puede predecir las cosas que suceden «.

Apenas unos días después de que terminó el evento, el entrenador en jefe de Xtreme Couture, Eric Nicksick, lanzó un video en cámara lenta de la secuencia final de la pelea y la opinión de su madre de que la tibia de McGregor se rompió por la patada en el teep lanzada antes de que se intercambiaran los golpes finales y McGregor cayó a la lona. 

El ex campeón de peso mediano de UFC y Strikeforce está de acuerdo en que el teep puede haber sido la guinda del helado proverbial cuando se trataba de la secuencia de eventos que llevaron a la lesión. Pero también está de acuerdo con Poirier cuando dijo que el daño se acumuló a través de varias patadas de McGregor potencialmente controladas.

La lesión también le recordó a Rockhold su pelea por el título interino contra Yoel Romero en UFC 221, donde finalmente fue detenido por Romero en el tercer asalto.

«No hay forma de que su tibia se rompa solo desde el codo por la patada que vi. Obviamente, se revisó con fuerza y ​​estaba listo para funcionar, y luego se abrió paso. Y es por eso que me contuve en mis patadas».

Mi primera patada contra Yoel Romero me fracturó la pierna. Mi pierna estaba agrietada y sabía que estaba comprometida y tenía que solucionarlo. No pude patear más. Sabía que estaba siendo eficaz con eso, pero mi pierna se estaba cayendo a pedazos. Yo sabía que algo estaba mal».

“Obviamente algo sucedió antes y Poirier lo estaba reconociendo. Creo que lo detuvo muy fuerte, creo que estaba fracturado y la patada en el codo probablemente lo puso por encima«.

Ya sea desde el punto de vista de la meritocracia o la emoción. La última aparición del jugador de 36 años fue en la división de peso semicompleto, donde sufrió una derrota por nocaut en el segundo asalto ante el ahora campeón mundial Jan Blachowicz en UFC 239 en julio de 2019.

LA LUCHA SIGUE...
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